Más de trescientos empleados del Ministerio de Economía y otras reparticiones del Estado fueron perjudicados por una maniobra presuntamente fraudulenta. Todos los afectados tramitaron un préstamo personal ante la Asociación del Personal de Economía y Hacienda (APEH) en los años ’96 y ’97. APEH es un sindicato afiliado a la CGT que representa a una parte de los trabajadores que dependen de Economía. Quienes pidieron el crédito –en general, sumas de dinero de hasta 900 pesos– lo pagaron con descuentos en sus sueldos. Sin embargo, cuando ya habían completado las cuotas, comprobaron que en las liquidaciones de haberes les seguían descontando una parte. El caso, caratulado como “defraudación”, está siendo investigado por la fiscalía de instrucción 9 y por el Juzgado de Primera Instancia 2, Secretaría 107.
Los afectados por la presunta estafa –les están cobrando dos veces el mismo crédito– son más de trescientos empleados del Ministerio de Economía, la Casa de la Moneda, la Secretaría de Agricultura, el Indec y la Obra Social del Ministerio de Economía (OSME). Se fueron conociendo lentamente, a medida que descubrían un lazo en común: en sus recibos de sueldo figuraba un descuento a nombre de la sociedad Coltep S.A. “Después de preguntar y cotejar información, comprobaron que el recorte correspondía a las cuotas del crédito que habían tramitado –y pagado– con el gremio APEH”, explica la denuncia.
Al momento de solicitar el crédito, el sindicato había pedido que firmaran pagarés para comprometerse a devolver lo que habían recibido. En los pagarés no decía quién cobraría las cuotas. Los afiliados estamparon su firma en los documentos de pago. Tiempo después, como es usual en estos casos, comenzaron a pagar el crédito. Cada mes, el Estado les descontaba una parte de sus haberes y se lo giraba a APEH. El sindicato, en tanto, no devolvió los documentos que ya habían sido saldados. En ese momento, los empleados no desconfiaron. Así sucedió hasta que se completó el monto que debían devolver en cuotas.
A mediados de 2003 recibieron un aviso de embargo a través del departamento de recursos humanos de Economía. El aviso decía que por orden judicial se procedería a hacer un descuento en el sueldo. Según el texto, “los documentos estaban impagos”. En el anuncio se agregaba que el embargo había sido solicitado por la sociedad Coltep S.A. Coltep es el nombre de una financiera que, piensan los damnificados, habría recibido los pagarés de parte del sindicato. Los empleados sospecharon que habían sido víctimas de una estafa. Comprobaron que APEH no les había pagado a las financieras que habían tramitado los créditos. El gremio respondió que los responsables de la maniobra pertenecían a la anterior comisión directiva. Los trabajadores hicieron reclamos en las Defensoría del Pueblo de la Nación y de la Ciudad. También presentaron una nota en la Secretaría de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia. Dentro de la cartera de Economía, el caso llegó a conocimiento del subsecretario de administración y normalización patrimonial, Andrés Estanislao Troha. El funcionario recibió a un grupo de afectados que le expusieron la situación. Tiempo después, un grupo de empleados hizo una denuncia penal que llegó a la Justicia.
Entre los más de trescientos afectados figuran empleados que dependen de Economía y otros organismos dependientes. También aparecieron otras personas que no trabajan en ningún organismo público. Todos comparten una misma desventura: tramitaron un crédito ante la APEH a mediados de los noventa. “Algunas compañeras no se animaron a firmar la denuncia porque tenían miedo. Muchas son empleadas de maestranza”, contó Pereira en diálogo con Página/12. La denuncia penal ya llegó a la Justicia: tramita bajo el número 72696/03 en la fiscalía 9 y el Juzgado 2.