EL PAíS
› FUE DETENIDO EL VIERNES EL DUEÑO DEL BOLICHE
Un prófugo de patas cortas
Omar Chabán fue capturado en sus oficinas de Monserrat y mañana será indagado por el delito de “homicidio y lesiones culposas”. Habrían identificado a los que tiraron las bengalas.
› Por Carlos Rodríguez
En ojotas y con el torso desnudo –la remera negra que llevaba fue usada para cubrirle el rostro–, el empresario Emir Omar Chabán fue detenido en sus oficinas de Salta 638, en el barrio de Monserrat. No llevaba puestas las esposas dado que su detención tuvo por objeto ponerlo a disposición de la Justicia, que mañana lo indagará, en principio, por el delito de “homicidio y lesiones culposas”, aunque es posible que la carátula pueda transformarse en “incendio doloso seguido de muerte”, que tiene una pena de ocho a 20 años de prisión. La jueza de la causa, María Angélica Crotto, estuvo varias horas en el lugar de los hechos y ordenó el secuestro de material pirotécnico que estaba en la administración del boliche República Cromañón. La investigación judicial tratará de establecer las razones por las cuales estaban cerradas las tres puertas del local. La responsabilidad podría extenderse al personal de seguridad del lugar e incluso a tres asistentes al recital, que estarían identificados, y que serían los que prendieron las bengalas que provocaron el desastre. Lo que no se sabía anoche era si los sospechosos habían salido ilesos del incendio.
“Todo fue un descontrol. La Argentina está en un peligroso tobogán en cuanto a las medidas de seguridad en los locales bailables. El local tiene tres puertas grandes y hasta una salida lateral hacia el estacionamiento, pero todas las salidas estaban cerradas con candados o atadas con alambres”, confirmó a Página/12 una fuente policial. “Es obvio que hubo negligencia de parte de la seguridad, porque las puertas tuvieron que ser abiertas por la fuerza, por la presión de la multitud y por el trabajo que hizo la policía desde la calle”, insistió el vocero. “También está el tema de la media sombra que cubría el techo y que se prendió fuego con las bengalas. Mucha gente salió caminando y se murió después en el hospital intoxicada por el humo del plástico que tiene la media sombra. Si se hubiera quemado madera, tal vez no había tantas muertes”, dijo la fuente policial aludiendo a las cuestiones que deben ser esclarecidas.
Otro de los interrogantes es cómo hicieron los involuntarios piromaníacos para entrar con las bengalas y los petardos del tipo “tres tiros”, que fueron los que ocasionaron el incendio. “Se supone que todos los asistentes fueron cacheados por el personal de seguridad y que les quitaron los artículos de pirotecnia (la jueza quiere saber si el material secuestrado el viernes era el que retuvo la custodia del boliche). ¿Entonces cómo pudieron ingresar con bengalas y petardos?”, se preguntó la fuente policial.
Una ex empleada de Cemento, otro boliche propiedad del empresario Chabán, aseguró a este diario que “las bengalas son ingresadas, por lo general, por los invitados especiales, dado que en los lugares VIP no se hace el cacheo. Por la información que tengo, en República Cromañón las bengalas llegaron del primer piso. Muchas veces los invitados las ingresan a pedido de los más fanáticos de los grupos de rock y después se las entregan a los chicos”. Martín Bizzio, manager de Callejeros, reconoció que la banda “es la más pirotécnica del país”, dato que no podía haber sido ignorado por los organizadores a la hora de pensar en la seguridad.
La capacidad del local y la cantidad de personas que ingresaron la noche trágica es otro de los datos que investiga la jueza. Al parecer, el tope de asistencia legal era de 1300 personas, aunque la empresa propietaria eleva la cifra a 4500. De todos modos, se dice que esa noche había unas seis mil personas. El fiscal de la causa, Juan Manuel Sansone, le tomó declaración a decenas de testigos en la sede de la comisaría 7ª, en Lavalle 2625. En la causa se trata de establecer si es verdad que se había habilitado, en uno de los baños del boliche, una especie de “guardería” para niños. Se presume que entre los muertos hay por lo menos dos chicos que tenían menos de 12 años y muchos otros resultaron heridos.
Chabán se hizo famoso por “Cemento”, el local de Estados Unidos al 1100 del que fue cofundador junto con la actriz Katja Alemann. El fiscal Sansone aclaró que, por ahora, al empresario “no se le imputa el delito deincendio seguido de muerte”, pero no descartó que eso pueda ocurrir si aparecen los elementos de prueba necesarios. La Justicia tendría la identificación de los tres jóvenes que habrían prendido las bengalas que provocaron el incendio. Hasta anoche se ignoraba si habían sobrevivido al siniestro. Chabán está detenido en la Superintendencia de Investigaciones de la Federal, en Madariaga 6976, en Villa Lugano.
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