De los 1796 internos que cumplen condena en el penal San Martín, 1180 están por robo, 310 por asesinato, 146 por violación y 160 por tráfico de drogas, de los cuales la mayoría son mulas o personas que venden pequeñas cantidades. Además, según el censo de 2002, el Sistema Nacional de Estadísticas sobre Ejecución de la Pena (Sneep), del Ministerio de Justicia de la Nación, en Córdoba el 72 por ciento de los condenados son jóvenes que tienen entre 18 y 35 años; el 64 por ciento tiene el secundario incompleto; el 68 por ciento tenía un trabajo de tiempo parcial al momento de ingresar a la cárcel. El 57 por ciento no tenía oficio ni profesión; el 95 por ciento no participó de ningún programa de capacitación laboral; el 72 por ciento no participó de ningún programa educativo y el 41 por ciento es reincidente. Una fuente del gobierno de Córdoba comentó a este diario que “entre 2001 y 2004 se acrecentó enormemente la población penal y los delitos que más crecieron son el robo contra la propiedad privada, producto de la crisis económica”.