EL PAíS
› PRIMEROS PASOS DEL ARI PARA LA CAMPAÑA
Solos y con Carrió arriba
Por José Natanson
En dos semanas, el ARI lanzará su campaña para las elecciones de octubre con una serie de afiches callejeros con eje en la idea del “contrato moral”. Con la movida, Elisa Carrió da el primer paso de una campaña que estará centrada en su figura y cuyos ejes principales se terminarán de definir en mayo, en un encuentro nacional del ARI en Mar del Plata. “El objetivo es consolidarnos como la principal oposición al Gobierno”, resume uno de los integrantes del Comité de Campaña consultado por Página/12.
Dos semanas atrás, Carrió designó a los seis integrantes del Comité de Campaña, cuyos nombres serán aprobados formalmente en mayo: se trata del concejal rosarino Pablo Javkin, el mendocino Néstor Piedrafita, el diputado por la provincia de Buenos Aires Fabián Di Nuccio, el dirigente porteño Carlos Iglesias y el secretario legislativo del bloque de diputados, Pablo Failde, además de Matías Méndez, el joven vocero de Carrió.
Las dos líneas centrales de la estrategia ya fueron definidas: Carrió, la máxima figura de la fuerza, encabezará la lista porteña buscando orientar la campaña en torno de su figura. El ARI, además, no ensayará alianzas en ningún distrito. Con estos dos ejes consensuados, la idea es adelantarse al oficialismo –que aún debe definir sus candidatos en los principales distritos– y comenzar a instalar tempranamente un mensaje propio: los afiches incluirán una apelación al “contrato moral” en el formato de un sello, que se repetirá en toda la propaganda partidaria, y no incluirán, por ahora, referencias concretas a los comicios.
En mayo, el ARI realizará un encuentro nacional en Mar del Plata, del que participarán las autoridades partidarias –la secretaria general, Elsa “Tata” Quiroz, y la titular de la Asamblea Nacional, Susana García–, además de Carrió, los diputados nacionales y los referentes del interior. El objetivo es terminar de definir en conjunto la estrategia para la campaña.
Allí se afinarán también los planes para cada provincia. Aunque el ARI presentará candidatos en todo el país, los mayores esfuerzos se orientan a tres distritos. El primero, donde están depositadas las mayores esperanzas, es la Capital: las encuestas ubican a Carrió en un buen lugar, peleando la punta o incluso superando por pocos puntos al oficialista Rafael Bielsa y al centroderechista Mauricio Macri. La lista de diputados se completaría con aquellos legisladores que deben renovar su mandato –se menciona a María América González– y con figuras extrapartidarias. “La pelea es nacional, pero la capacidad de liderar la oposición se juega en la Capital”, explica un dirigente del ARI.
Las cosas se perfilan un poco más difíciles para el ARI de la provincia de Buenos Aires, que ayer realizó un congreso en el Teatro San Martín. La ex titular de CTERA, Marta Maffei, encabezará la boleta de senadores y, aunque aún no se discutió el tema, todo indica que la lista de diputados estará integrada por los actuales legisladores Marcela Rodríguez y Fabián Di Nuccio, a quienes podrían sumarse Carlos Raimundi, titular del ARI bonaerense, y Elsa Quiroz.
Cerca de Carrió aseguran que, después de tres elecciones, el ARI como fuerza política –lo que ellos llaman “la marca ARI”– se encuentra bastante instalado en la provincia. Confían en que el impacto de la candidatura de Carrió logrará traspasar las fronteras de la General Paz para irradiar al territorio bonaerense, especialmente a los centros urbanos: algunas zonas del Gran Buenos Aires y ciudades como Mar del Plata o La Plata, donde el ARI quedó segundo en las elecciones provinciales y primero en las presidenciales.
Sin embargo, el panorama se complica si se tiene en cuenta que Maffei deberá enfrentar a la arrolladora estructura del PJ, potenciada por el alto nivel de popularidad que conserva el Gobierno en territorio bonaerense y el atractivo de una eventual candidatura de Cristina Kirchner. A este cuadro se suma el esfuerzo del centroderecha, que se juega su supervivencia postulando a Ricardo López Murphy. “Sabemos que va a ser difícil, pero nuestro objetivo no es ganar de cualquier forma, sino ser una fuerza de reserva”, sostiene Raimundi.
En Santa Fe, Carrió mantiene un importante predicamento, sobre todo en la populosa Rosario. El problema es que el ARI no cuenta con una figura lo suficientemente taquillera como para hacerse lugar entre el peronista Horacio Rosatti y el socialista Hermes Binner, que liderará un frente de centroizquierda. El candidato histórico del ARI, el sindicalista Alberto Piccinini, ya anunció que no quiere renovar su mandato. Algunos mencionaban como alternativa a Rubén Lo Vuolo, el economista de cabecera de la chaqueña, pero hasta ahora no hay nada definitivo. “La idea es terciar entre el PJ y Binner, tratar de romper la polarización, pero va a ser difícil”, reconocen cerca de la chaqueña.
En cuanto al resto de los distritos, los integrantes del Comité de Campaña están convencidos de las posibilidades de obtener buenos resultados en La Pampa, Mendoza (un candidato posible es el compañero de fórmula de Carrió, Gustavo Gutiérrez) y Tierra del Fuego, donde Fabiana Ríos dio un batacazo el año pasado. En las otras provincias las cosas pintan mucho más complicadas y hay lugares claves, como Córdoba, en donde la fuerza de Carrió nunca logró hacer pie.
Desde un punto de vista más general, en el ARI aseguran que la estrategia de unificar las elecciones les facilita las cosas, al permitirles concentrar energía y recursos en un solo día. “Nuestro partido es chico, con poca estructura y sin fondos. Con la unificación podemos evitar la dispersión de las elecciones desdobladas y aprovechar mejor la figura de Lilita. Su liderazgo es nacional, va a irradiar a otros distritos”, explican.
Al mismo tiempo, la unificación contribuirá a nacionalizar los comicios, que seguramente serán percibidos como un primer test de la gestión kirchnerista. “Es posible que el Gobierno salga bien parado si se toma en cuenta el resultado nacional, pero si nosotros logramos ganar o empatar en la Capital y hacemos una buena elección en dos o tres provincias grandes vamos a consolidarnos como la principal fuerza de la oposición. Ese es nuestro objetivo”, concluyen en el ARI.