EL PAíS
› CAMBIO DE GABINETE EN EL GOBIERNO DE LA CIUDAD
Escoba nueva, Ibarre bien
Aníbal Ibarra busca relanzar su gestión. Las variantes en su equipo buscan reducir estructuras y también consolidar su base política. Los nuevos funcionarios, su relación con el Frepaso y la UCR.
› Por Santiago Rodríguez
El jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, decidió realizar algunas modificaciones en su gabinete y –como en oportunidades anteriores– combinó cuestiones políticas y de gestión a la hora de definir los nombres de los colaboradores de los que se va a desprender y los que vendrán a reemplazarlos. El principal cambio es la eliminación, por un lado, de las secretarías de Planeamiento Urbano y Justicia y Seguridad, y la creación, por otro, de la Secretaría de Gobierno y Control Comunal, que estará en manos de la radical Silvana Giudice y centralizará todas las tareas de fiscalización hasta ahora repartidas en distintas áreas de la administración de la ciudad. Ibarra apuesta así a mejorar su gestión –quizá la única tabla de salvación que tiene para aferrarse para conseguir su reelección– y, de paso, consolida sus vínculos con los sectores del radicalismo con los que puede llegar a armar algo para las próximas elecciones.
Los nuevos secretarios porteños “jurarán posiblemente entre el lunes o el martes próximo porque todavía tengo que firmar los decretos”, explicó Ibarra a Página/12. Giudice no será la única: en el mismo acto asumirá el frepasista Eduardo Epstein como nuevo secretario de Medio Ambiente y Desarrollo Urbano, área en la que a partir de ese momento recaerán parte de las funciones de las que se venía ocupando Planeamiento Urbano.
El nombre de Epstein ya se había mencionado en algún momento para ocupar ese cargo porque conoce la temática de Medio Ambiente. “Viene del ETOSS (Ente Tripartito de Obras y Servicios Sanitarios) y de la cuenca Matanza-Riachuelo”, precisó Ibarra.
La jura de los nuevos funcionarios marcará la salida de los actuales secretarios de Medio Ambiente, Eduardo Ricciutti, y de Planeamiento Urbano, Enrique García Espil. Las situaciones de uno y otro y su futuro son diferentes.
Ricciutti ya venía hablando con Ibarra sobre la posibilidad de dejar el cargo por razones personales y el jefe de Gobierno no tiene aún resuelto si nombrarlo al frente de la Corporación Puerto Madero o en Autopistas Urbanas SA. El alejamiento de García Espil, en cambio, se había convertido desde hace unos meses en una mera cuestión de tiempo. “Tener una secretaría que haga planes urbanos en el actual contexto no es acorde con la realidad”, destacó Ibarra.
A partir de la salida de García Espil, además, ya no quedarán más delarruistas sentados a la mesa del gabinete de Ibarra. Giudice –quien viene desempeñándose como subsecretaria de Medio Ambiente– estuvo alguna vez en ese sector del radicalismo porteño, aunque actualmente podría decirse que no está identificada con ninguna línea partidaria en particular. “Es una excelente funcionaria; conoce la función pública y es eficaz”, la alabó Ibarra. La designación de Margarita Charriere –una dirigente cercana a la secretaria de Promoción Social, Gabriela González Gass– como segunda de Epstein constituye otro guiño a los sectores de la UCR que vienen acompañando la gestión ibarrista.
Ibarra busca optimizar su administración porque sabe que la gestión es en estos momentos la mejor plataforma de cualquier deseo electoral. Desde la nueva secretaría que le tocará asumir, Giudice monopolizará con ese objetivo todo el poder de control que hasta ahora está repartido en las áreas de Desarrollo Económico, Medio Ambiente y Planeamiento Urbano.
El desguace de la estructura de la Secretaría de Justicia y Seguridad –vacante desde la renuncia del radical Facundo Suárez Lastra– se cobrará la cabeza del también radical Agustín Zbar, cuya actuación en la Subsecretaría de Justicia fue cuestionada en el caso de las hamburguesas contaminadas de McDonald’s. Esa área se convertirá en una Dirección dentro de Legal y Técnica y Zbar podría terminar como representante de la ciudad en el ente que maneja el puerto de Buenos Aires. El subsecretario de Seguridad, Enrique Carelli, seguirá en su cargo.