EL PAíS
› MARIA JULIA DA DETALLES SOBRE LOS SOBRESUELDOS
Se cansó de ser la única
La ex secretaria de Medio Ambiente, presa desde hace más de un año, criticó a los ex funcionarios que no reconocen el pago de sobresueldos y al mismo Carlos Menem por su actitud “titubeante”.
Sólo ella sabe si lo hizo por la bronca íntima de ser la única que recibió un castigo o por alguna otra razón. Lo cierto es que María Julia Alsogaray –condenada a tres años de prisión por enriquecimiento ilícito– volvió a hablar sobre el pago de sobresueldos durante la década menemista. Lo hizo a través de una carta de lectores que publicó ayer el diario La Nación. Si bien ella misma había admitido la existencia de estos “sobres”, esta vez intentó dejar en claro que esa práctica era conocida y compartida por todos sus ex compañeros de gabinete, y hasta criticó a varios de ellos por negarlo ante la Justicia.
El tema del pago de sobresueldos durante la década del ’90 estalló hace exactamente un año, cuando Roberto Martínez Medina, un ex secretario del ex ministro de Justicia Raúl Granillo Ocampo, declaró en el juicio por enriquecimiento ilícito contra María Julia que su antiguo jefe recibía mensualmente un pago en negro de 50.000 dólares. Medina aseguró además que él era el encargado de ir a buscar el dinero a la Jefatura de Gabinete –a cargo de Jorge Rodríguez– y que en ese trámite solía coincidir con asesores de otros ministros que iban por su parte.
Esta revelación fue una de las coartadas que intentó utilizar la ex secretaria de Medio Ambiente para justificar ante la Justicia el llamativo incremento que registró su patrimonio durante su paso por la función pública. Pero fue en vano, porque el Tribunal Oral 4 determinó en el fallo que la condenó que esos pagos en negro eran parte de “un sistema perverso e ilegal”.
Ese sacudón derivó en una nueva investigación que extendió las sospechas a varios ex integrantes del Ejecutivo menemista. Entre ellos figuran, además de Granillo y Rodríguez, Claudia Bello, Jorge Domínguez, Alberto Mazza, Beatriz Gutiérrez Walker, José Uriburu, Domingo Cavallo, y hasta Carlos Menem.
En la carta de María Julia que fue publicada ayer, la ex funcionaria aseguró que cuando comenzó a participar en las reuniones de gabinete en 1991, “simultáneamente fui convocada por el secretario general de la Presidencia, Dr. Eduardo Bauzá, a una reunión en su despacho, donde me comunicó que mensualmente recibiría una suma de dinero acorde a mi situación”. Según explicó, el manejo de ese dinero “quedaba a mi criterio, pues se trataba de un monto sobre el que no se rendían cuentas”.
La ex polifuncionaria recordó además que en una reunión encabezada por Menem con todos los ministros y secretarios presentes, el entonces titular de la cartera de Economía, Domingo Cavallo, habló sobre la conveniencia de “declarar el ‘sobre’ tanto ante la AFIP como en las declaraciones juradas”. Con algo de ironía, María Julia señaló que en ese momento “nadie levantó la mano. Nadie preguntó ‘¿De qué sobre hablan?’. Desde el presidente de la Nación hasta los legisladores presentes dieron muestra de tener en claro el tema”.
“La suma percibida por los secretarios –detalló– era de 40 mil pesos y, hasta donde supe por comentarios en gabinete, la de los ministros no bajaba de 100 mil pesos (suma posteriormente reducida a la mitad) según las mismas fuentes.”
En esa línea, cuestionó a algunos funcionarios por “haber mentido bajo juramento negando esos hechos”. Lo mismo hizo con Menem por su “actitud titubeante y contradictoria en sus declaraciones al respecto”, ya que el ex presidente desmintió en reiteradas ocasiones la existencia de estos pagos, hasta que finalmente reconoció que ésa era una práctica real. Menem dejó en claro, de todos modos, que él no recibía nada. Otros, como el ex titular de la cartera de Defensa, Oscar Camilión, confesó hace algunas semanas ante la Justicia haber cobrado mensualmente 30 mil dólares “en negro”.