EL PAíS
› EL PAPELON DE LA LEY DE SUBVERSION DIVIDE AL BLOQUE DEL PJ
Cuando todos juegan al Gran Bonete
› Por Felipe Yapur
El bloque de senadores del PJ es un hervidero. No sólo se está conformando un sub bloque, paso previo a la fractura, también surgieron fuertes críticas entre los legisladores que acompañaron la escandalosa media sanción a la derogación de la Ley 20.840 o de Subversión Económica. Este sector lanzó dardos hacia la conducción de la bancada a cargo de José Luis Gioja, pero sobre todo al presidente Eduardo Duhalde, a quien le achacan falta de liderazgo y, sobre todo, un plan de gobierno.
La polémica sesión del jueves a la madrugada está haciendo sentir los costos políticos de haber abandonado el proyecto oficial –por falta de votos– para apoyar la derogación que promovían los representantes de dos partidos procesistas. Durante la inusual reunión de bloque de ayer, Gioja escuchó fuertes reproches a su decisión de votar un proyecto que era desconocido para la totalidad del grupo. Pero también las hubo para Duhalde, y fueron las más duras.
Muchos de los senadores que participaron de la reunión se sorprendieron por la virulencia de los dichos de Oscar Lamberto. Colorado de la bronca, el reutemista no sólo contó que había decidido renunciar a la banca -desistió después por presión de Carlos Reutemann– sino que advirtió que “nunca más votaré una ley de estas características que perjudican a la gente”. A renglón seguido, el santafesino señaló al Gobierno como el principal responsable de lo ocurrido el jueves a la madrugada. “Cómo es posible que el gabinete se haya ido a dormir cuando nosotros estábamos debatiendo una ley que es clave para ellos. Al menos alguien del gabinete debería haber estado en el Senado. Es algo elemental, si hasta el gobierno de (Fernando) De la Rúa lo hacía”, dijo con la voz ronca, los ojos llenos de lágrimas y clavándole la mirada a la duhaldista Mabel Müller.
La bronca de muchos de los presentes se incrementó con los despachos de las agencias de noticias que vomitaban declaraciones de diputados justicialistas en contra de lo resuelto en la Cámara alta. Las sospechas de sobornos que daban cuentas las declaraciones tanto de Jorge Obeid, José María Díaz Bancalari y de Ricardo Falú, elevaron la temperatura en la reunión de bloque. Tanto que Lamberto junto a Carlos Verna y Ramón Puerta anunciaron que “la Ley de Quiebras no se debatirá hasta tanto veamos qué hacen los diputados con la de Subversión Económica”.
El anuncio de este trío no sólo echó por tierra la intención de Gioja de darle tratamiento a la norma durante la semana que viene, sino que también fue un mensaje directo a Duhalde, quien ayer en un intento por bajar los decibeles les agradeció el esfuerzo a los senadores pero inmediatamente dijo que había que corregir la norma votada “para que no se deje lugar a ningún tipo de impunidad”.
A la queja de Lamberto se sumó la de la mendocina María Perceval, quien sollozando señaló que no podía creer lo que había sucedido y anunció que se tomará unos días para decidir qué hará. No dio más pistas. Otro que pegó el grito en el cielo fue Antonio Cafiero, pero a diferencia de los demás, al veterano peronista lo que más le molestó es haber aparecido en los medios por el resultado de la votación: “Hay que enviar notas a los diarios, nos tratan como a delincuentes”. Su exposición sólo arrancó algunas sonrisas.
Parecía que todo iba a quedar allí. Pero Gioja decidió pedirle explicaciones a Cristina Kirchner, quien había calificado de bochornosa la sesión. “No te voy a dar explicaciones ni a vos ni a nadie. En todo caso pedíselas a Díaz Bancalari o a Obeid que hablan de la Banelco –le replicó con vehemencia la santacruceña–. Además, te recuerdo que es lo mismo que les había dicho en la reunión de bloque anterior”, señaló. Müller la interrumpió: “No, eso fue en la otra reunión”, pero no pudo continuar, Kirchner la cortó en seco: “Con vos, no hablo” y continuó diciendo que “yo no me hago cargo de la torpeza de ustedes. Creía que tenían una estrategiaparlamentaria, podían desde hacer caer la sesión hasta pasar a un cuarto intermedio. Pero prefirieron votar ese adefesio”.
A pesar de todo, Gioja sigue considerando que lo realizado “es lo mejor que se podía hacer”. Insiste con el reconocimiento de Duhalde y junto a otros miembros de la mesa de conducción comenzaron a llamar a los gobernadores para que apoyen lo realizado el jueves. Uno de los primeros fue el salteño Juan Carlos Romero, quien destacó que la derogación integraba uno de los 14 puntos que habían firmado los gobernadores con Duhalde dos semanas.
Si las críticas fueron una consecuencia de la sesión del jueves, la irrupción de un sub bloque es tal vez la más importante. No es la primera vez que ocurre, ya en la gestión anterior la bancada oficialista llegó a tener cuatro. Si bien la posibilidad de conformar esta alternativa a la conducción del bloque oficialista, la derogación de la 20.840 fue el detonante.
La principal característica del nuevo grupo es, a todas luces, su heterogeneidad. A este grupo confluyen senadores como Jorge Yoma, los santacruceños Kirchner y Nicolás Fernández, los entrerrianos Jorge Busti y Graciela Bar. Pero también estarán dos de aquellos que acataron la orden de votar la derogación como la santafesina Roxana Latorre y la tucumana Malvina Seguí. Ambas le anunciaron a Gioja que no volverían mientras él siga al frente de la bancada. El sanjuanino cree que luego de una larga charla “las senadoras reconsiderarán su posición”.
Por ahora, el sub bloque seguirá siendo eso y no competirá por la dirección de la bancada. “Sólo queremos definir una estrategia parlamentaria que, si es posible, sirva para salvaguardar el partido.”