Dom 17.07.2005

EL PAíS

Todos contra todos

Aunque la atracción principal es la pelea bonaerense, la disputa de la Capital también tiene su encanto. La candidata del ARI, Elisa Carrió, acusó ayer al Gobierno de “comprar votos” e insistió en comparar al resucitado Domingo Cavallo con Leopoldo Galtieri, a lo que el ex ministro salió a responder que la chaqueña se niega a debatir con él. Mientras, el oficialista Rafael Bielsa se defendió de las acusaciones contra el Gobierno y Mauricio Macri, de viaje por Corea, delegó la tarea en Horacio Rodríguez Larreta.
La más dura fue Carrió. Aunque encabeza la lista de diputados nacionales de la Capital, la líder del ARI ha decido nacionalizar su campaña y centrar sus críticas en Néstor Kirchner. Ayer, luego de visitar Río Negro, la chaqueña pasó por Neuquén para inaugurar la sede local del Instituto Hannah Arendt. “Es un disparate que todos los dineros públicos y de la gestión del Estado estén empeñados en una elección parlamentaria, en la compra de votos y en la cooptación de intendentes en todo el territorio nacional a cambio de promesas de obras públicas”, señaló Carrió.
Casi al mismo tiempo, pero en la Capital Federal, Cavallo le respondía a la líder del ARI, que lo había comparado con Galtieri. “Este no es un cuestionamiento, sino una chicana. Me quiere descalificar porque no se anima a debatir conmigo. Sabe que la voy a desenmascarar frente a la opinión pública por todas las mentiras que ha dicho”, aseguró el ex ministro.
Cavallo también insistió con su campaña, que consiste en criticar al Gobierno y a Eduardo Duhalde, al que responsabiliza por todos los males de la Argentina, al tiempo que elogia a los candidatos de centroderecha. Ayer, en una definición que no les hace mucha gracia a los involucrados, dijo que Patricia Bullrich es “una gran mujer”, que Mauricio Macri es “un hacedor”, y hasta se animó a proyectar un camino común. “Si se conforma una fuerza capaz de gobernar y resolver los problemas de la gente estaremos juntos”, dijo Cavallo. Y, cuando le preguntaron por Bielsa, respondió: “Es un pésimo canciller y está llevando adelante la peor política exterior que haya tenido la Argentina”.
Pero Carrió y Cavallo no fueron los únicos que salieron a agitar la disputa porteña. Combinando su trabajo de canciller con los cruces inevitables de cada campaña, Bielsa respondió a sus adversarios. “En mi cabeza no tengo la estampita de Carrió ni la de Macri, sino lo que tenemos que proponerle a la sociedad para una elección legislativa”, dijo Bielsa. Y definió: “Si usted escucha el discurso de Macri, él está reiterando una campaña a jefe de Gobierno que ya perdió. Carrió, en cambio, está reiterando una presidencial en la que salió quinta o sexta, no me acuerdo”.
Macri no pudo salir a responder porque se encontraba de gira por Corea junto al plantel de Boca, pero delegó la tarea en su número dos, Rodríguez Larreta. El economista, que seguramente encabezará la lista de legisladores porteños de su partido, siguió la línea trazada por Macri, que intenta llevar la discusión al terreno porteño con variadas críticas al gobierno de la ciudad. Ayer, justamente, Rodríguez Larreta calificó como “un inútil” a Aníbal Ibarra y extendió el cuestionamiento a los otros candidatos. “Ni Carrió ni Bielsa conocen los problemas de la Capital”, concluyó.

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