“Es tiempo de los actores inéditos. No tener gloria no es lo mismo que no tener trayectoria.” Así definió Rafael Bielsa la etapa que marca las elecciones legislativas dentro del proyecto presidencial de Néstor Kirchner y la lista de candidatos que lo representa en el distrito porteño. El canciller se calzó el traje de candidato –en el lanzamiento oficial de su campaña en Parque Norte– y arremetió contra los argumentos que esgrime la oposición. Cargó contra Elisa Carrió y Mauricio Macri, y tampoco se olvidó de denostar a Carlos Menem, Fernando de la Rúa y Adolfo Rodríguez Saá. Arriba del escenario lo acompañaron todos los candidatos a legisladores para la ciudad y a diputados nacionales. Abajo, el propio Presidente, parte de su gabinete, funcionarios y militantes de las diversas corrientes aplaudieron los discursos distanciados de la tradicional liturgia peronista.
La primera palabra de su discurso, “compañeros”, arrancó el aplauso del auditorio que llenó Parque Norte. Es que apenas unos minutos antes Bielsa (igual que la economista Mercedes Marcó del Pont y el actor Claudio Morgado, sus compañeros de lista) acompañaron en silencio la marcha peronista que el público arrancó a capella y de manera improvisada. Por eso también Bielsa se refirió a la herramienta electoral: el Frente por la Victoria, algo que los oradores que lo antecedieron –el cineasta Jorge Coscia y el librero Elvio Vitali– respaldaron con el argumento que “con el peronismo no alcanza”.
El canciller se mostró “orgulloso” de formar parte de “la reconstrucción de un nuevo país” y de “un proyecto colectivo” para encararlo, “aunque el esfuerzo que falta –insistió Bielsa– sea mayor que el que hemos hecho y todavía nos acechen palos en las ruedas, las cosas pueden ir mejor”. Luego sintetizó su idea en un ejemplo que referenció en el primer mandatario, que lo escuchaba desde la platea: “El Presidente Kirchner lo sabe: cuanto más puro es el sacrificio más veloz es el progreso”.
Luego escogió pocas palabras para explicar la debacle más reciente de la Argentina: “Menem, privatizaciones y vanidad; De la Rúa, 20 de diciembre, paredón y después; Rodríguez Saá, default y negligencia”. Pero como contrapartida también habló de un país en el que se formaron hombres destacados en todas las disciplinas y comenzó a nombrar una larga lista que incluyó, entre otros, a los premios Nobel César Milstein y Adolfo Pérez Esquivel; escritores como Jorge Luis Borges, Leopoldo Marechal, Julio Cortázar, Arturo Jauretche y Ernesto Sabato; pasando por el cirujano René Favaloro y hasta el músico Astor Piazzolla.
Después entró de lleno en la campaña y embistió contra la oposición. “Enfrente tenemos los que piensan que los problemas complejos tienen soluciones erróneas, sencillas y fáciles de comprender. Nos piden planes, dicen que no los tenemos. Como dijo Mafalda, ¿y si en vez de planear tanto nos decidimos a volar más alto?”, se preguntó como respuesta Bielsa. “Nos proponen un nuevo contrato moral –continuó el canciller–, sin el cual la Argentina no tiene salida. ¿Qué contrato moral, me pregunto, puede contener una cláusula que obligue al que lo firme a alegrarse si los peronistas se matan los unos a los otros?, como se alegró Carrió.”
Siguiendo la misma lógica, se refirió a Macri pero esta vez sin nombrarlo. “Nos proponen firmar un nuevo contrato de eficiencia, sin el cual la Argentina no tiene salida. ¿Alguien necesita otro contrato redactado por la patria contratista? ¿Quién desea acompañar a los que por todo futuro nos proponen volver a 1990?, insistió Bielsa.
Después sintetizó su propuesta. “Aquí no hay lugar para la cosmética, ni tenemos tiempo. No queremos un capitalismo periférico prolijo y profundamente excluyente. Basta de democracia taciturna, nadie vino aquí sólo a administrar saldos y retazos”, sentenció Bielsa en uno de los párrafos mas aplaudidos de su discurso. El final fue con una consigna queterminó por levantar a los presentes: “A las cosas compañeros, por la victoria en todo el país”, gritó el candidato.
Kirchner, el jefe de Gabinete y titular del justicialismo porteño, Alberto Fernández, y los ministros Aníbal Fernández, Daniel Filmus y Julio De Vido se acercaron a saludar a los candidatos. Arriba del escenario festejaban igual que el resto de los concurrentes los candidatos a diputados Marcó del Pont, Coscia, Morgado, el judicial Julio Piumato (que contó con barra propia) y Gabriel Fucks.