Sorpresivamente unos quinientos piqueteros aparecieron en la estación Constitución y bloquearon las boleterías, como parte del plan de medidas sorpresa anunciado el lunes. Luego de una hora, la Policía Federal los obligó a retirarse. El número de efectivos de la Infantería desplegados en la estación excedía ampliamente a los manifestantes, con lo que el Gobierno intentó mostrar un nuevo gesto de endurecimiento frente a las protestas. Además se registraron cortes aislados en unas diez provincias. Allí también estuvieron custodiados por fuertes operativos de seguridad. Todas las expectativas ahora están puestas en la marcha de mañana a Plaza de Mayo, que convocaron las agrupaciones piqueteras del denominado sector duro, con los docentes universitarios y los trabajadores del Garrahan.
Durante una hora las boleterías de Constitución quedaron bloqueadas y los pasajeros viajaron gratis. Según informaron fuentes policiales, se habían desplegado efectivos desde la mañana, como parte de un plan organizado por el Ministerio del Interior para prevenir acciones sorpresivas. La protesta estuvo encabezada por la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y unas diez agrupaciones minoritarias. Juan Carlos Alderete reivindicó la medida como una alternativa frente a los operativos de seguridad dispuestos por el Gobierno y anunció que en las próximas semanas adoptarán los escraches contra las empresas como principal modalidad de lucha. “Al Gobierno le preocupaba que se lograra hacer algo. Pero no pueden impedir nuestro derecho a manifestarnos, como quedó hoy evidenciado”, evaluó Ernesto Aldana de la FTC.
También se registraron cortes en los partidos de San Martín, Almirante Brown, Ezeiza, Vicente López y La Matanza. A diferencia de Capital Federal, esos puntos estuvieron custodiados por efectivos de Gendarmería y la Bonaerense. En el resto del país, las agrupaciones también se movilizaron con cortes y marchas en algunas de las capitales provinciales. En Jujuy los dirigentes de la CCC denunciaron que la policía usó balas de goma contra los manifestantes. No se registraron heridos y fue el único incidente que se conoció durante la jornada. A estas protestas se sumó una marcha que realizaron los militantes del MTR-CUBA al Luna Park para reclamar la libertad de seis personas que fueron detenidas el año pasado durante una protesta contra el titular del FMI, Rodrigo Rato.
Las acciones sorpresivas habían sido acordadas por el conjunto de organizaciones piqueteras que integran el denominado sector duro. Sin embargo, el grueso de las agrupaciones finalmente decidió no participar de las medidas, ya que consideraron que terminaría por desgastar las protestas. Así lo señaló el titular del Polo Obrero, Néstor Pitrola, quien consideró que “las medidas tomadas aisladamente sirven para debilitar el movimiento”. Como base de un acuerdo de unidad, convinieron concentrarse en la marcha de mañana. Bajo la consigna “Por el trabajo, la salud y la educación”, los piqueteros se movilizarán desde el Hospital Garrahan, en apoyo a los trabajadores en huelga. La marcha será a Plaza de Mayo y estarán acompañados por los docentes universitarios y diversos sectores sociales en conflicto. Si bien el reclamo central girará “en torno de la demanda de puestos dignos de trabajo”, el principal interés de las organizaciones es dejar un mensaje de unidad “contra las políticas del oficialismo, en repudio de las nuevas medidas contra el derecho de manifestarse”.
Por su parte, el Gobierno volvió a insistir en que “se sancionará a quienes cometan excesos”. En contraste con las declaraciones del ministro de la Corte Suprema Raúl Zaffaroni, quien el lunes había asegurado que la Justicia penal no puede intervenir para prevenir los cortes de ruta porque son “una contravención”, ayer el ministro del Interior, Aníbal Fernández, consideró que los cortes son “un exceso del uso de los derechos constitucionales” y que, por lo tanto, constituyen “un delito que el Estado sancionará”.

Informe: Carolina Keve.