Mientras los trabajadores de estaciones de servicio de Santa Fe y Córdoba bloquearon ayer los accesos a las plantas almacenadoras de combustible ubicadas en reclamo de mejoras salariales que complicó el normal abastecimiento, los trabajadores petroleros del norte de Santa Cruz cumplieron ayer el quinto día de paro en demanda de que sus haberes sean equiparados con sus pares del sur de esa provincia. En el caso de Córdoba, la protesta terminó en forma abrupta por la noche, cuando la policía desalojó por la fuerza a los manifestantes que impedían la entrada y salida de vehículos de la planta que Repsol posee en la localidad de Montecristo. “Esta no es la primera protesta ni va a ser la última”, afirmaron delegados gremiales, tras recordar que “hace más de dos mese que reclamamos una actualización salarial”.