Elisa Carrió terció ayer en la polémica abierta en torno del spot publicitario de Ricardo López Murphy y reclamó a los políticos en campaña que “dejen la vulgaridad y la grosería de lado”. La candidata a diputada del ARI en la Capital Federal trató de sacar provecho de la controversia al presentar el plan anticorrupción diseñado por la fuerza política que lidera. La iniciativa consiste en un conjunto de proyectos de ley tendientes a fortalecer la independencia de los organismos de control de los actos de gobierno y prevé, entre otras cosas, mantener abierta la posibilidad de recuperar los fondos robados al Estado aun después de la prescripción de las causas penales tramitadas en cada caso.
“El problema no es una ventaja electoral, sino que se devalúa a la clase política”, advirtió Carrió ante los medios de prensa que se dieron cita en la sede del Instituto Hannah Arendt para la presentación del plan anticorrupción del ARI. Si bien ése era el motivo de la convocatoria, la candidata no se mantuvo al margen de la discusión que suscitó el aviso de López Murphy y advirtió sobre las eventuales consecuencias que tendría el descrédito de la clase política. “Es devaluar la única salida que tiene este país”, vaticinó, tras reclamar a los demás políticos en campaña que terminen con “la vulgaridad y la grosería”.
Carrió llegó sonriente y se fue de la misma manera. “Voy a ser presidente”, dijo una vez más al retirarse.
Además de presentar su propuesta para enfrentar la corrupción y opinar de la publicidad del candidato a senador bonaerense de PRO, la jefa del ARI celebró las últimas encuestas. En esos sondeos aparece primera en la Capital Federal en la pelea que mantiene con Mauricio Macri y Rafael Bielsa por un lugar en la Cámara baja, mientras que la candidata a senadora de su partido en la provincia de Buenos Aires, Marta Maffei, figura a tiro del tercer lugar que ostenta López Murphy.
La diputada Marcela Rodríguez acompañó a Carrió en la presentación del plan anticorrupción. Fue la legisladora quien, después de los comentarios de su jefa política sobre el devenir de la campaña electoral, precisó los detalles y los alcances de la propuesta del ARI en ese sentido.
Lo que Carrió presentó como plan anticorrupción es una serie de proyectos de ley que básicamente apuntan a fortalecer la independencia de los organismos de control gubernamental, como la Sindicatura y la Auditoría General de la Nación, a otorgarle al Estado mejores herramientas para recuperar el dinero de la corrupción e impulsar la apertura de la información pública y promover límites para las contrataciones directas.
Uno de los aspectos destacables de la propuesta surge en el capítulo sobre el recupero de los fondos de la corrupción. Al respecto se contempla, entre otras medidas, ampliar las posibilidades de decomiso como también permitir que la persecución de los fondos robados perdure en el tiempo aun cuando las causas penales vinculadas hubieran prescripto.
El plan del ARI para combatir la corrupción incluye también la obligación de que los jueces presenten sus declaraciones juradas y un seguimiento de las causas prescriptas. “El objetivo es descubrir si los jueces hacen dormir las causas cuando tienen los mismos procesados o apuntan contra las mismas empresas”, explicó Rodríguez.