Esta vez sí, los diputados están convencidos de que la “maratónica” sesión de hoy será la última del año, para dar rienda suelta a las vacaciones y a la actividad política de cada uno de sus distritos en vísperas de un año electoral. El trabajoso consenso entre oficialistas y opositores se plasmó en una voluminosa orden del día donde cada bloque trató de imponer sus prioridades. Las bancadas opositoras pusieron contra la pared al kirchnerismo, que tuvo que dar marcha atrás con el forzado dictamen sobre el marco regulatorio de AySA (ver aparte) y lo obligó a convocar a una reunión de emergencia de la Comisión de Obras Públicas de la Cámara baja para que habilite su tratamiento en el recinto. Varios temas polémicos quedaron relegados para 2007.

“Viene de maratón”, dijo a la pasada y en un estricto código legislativo un colaborador del bloque oficialista a su regreso de la reunión de Labor Parlamentaria, en la que los jefes de cada bloque político acuerdan los temas que llegarán al recinto. Todo indica que la sesión de hoy durará hasta que ardan las velas. O que se caiga por falta de quórum, tras una silenciosa deserción de diputados ya entrada la madrugada, como sucedió en las dos extensas jornadas de la semana anterior y durante todo el agitado diciembre parlamentario.

La discusión no fue fácil. El kirchnerismo llevó a la comisión un temario tentativo, con proyectos que urgen al oficialismo, para la que será la última sesión del año. Pero regresó con una lista con tres hojas más repletas de temas que la oposición tampoco quiere dejar relegados. El oficialismo tampoco pudo ocultar el duro revés sobre una de las prioridades del gobierno: el marco regulatorio de AySA, la empresa proveedora de agua potable y sistema de cloacas a toda el área metropolitana de Buenos Aires.

A las 10 de la mañana está citada la Comisión de Obras Públicas que aprobará el dictamen de la mayoría, que ayer el oficialismo forzó –según la oposición– sin el quórum necesario. Un tema que el oficialismo insistió en negar, aunque accedió a la nueva convocatoria de la comisión con el “único objetivo” de no volver a tropezar con otro inconveniente en el recinto.

La sesión se abrirá “antes del mediodía” con un homenaje a las víctimas del 19 y 20 de diciembre de 2001. Pero el primer lugar en los temas a tratar está reservado para AySA. Lo seguirá una extensa y variada lista de proyectos –que a última hora de ayer preparaban los colaboradores parlamentarios de la Cámara– que van desde modificación a la Ley de Pesca y correcciones menores a la Ley de Trabajo hasta ejercicio profesional de la musicoterapia.

Pero no pocos y polémicos proyectos quedaron fuera de la lista, a pesar de cierto apremio del oficialismo por resolverlos durante este período parlamentario, que se cerraría hoy. Las bajas incluyen la creación del Instituto de Datos Genéticos y la incorporación de la figura de “acoso sexual” en el Código Penal, que la dura controversia desatada en la última sesión de la Cámara baja devolvieron a las respectivas comisiones en busca de un mayor consenso.

Tampoco se convertirán en ley este año la normalización del Pami, la entrega gratuita del método anticonceptivo conocido como la píldora del día después, el marco regulatorio para la medicina prepaga y la incorporación de los tratamientos contra la obesidad en el Plan Médico Obligatorio. Aunque nadie oficialmente lo descarta, el ordenamiento contra la tala ilegal de bosques nativos –que fue ya aprobado en general– no sería convalidada en particular, lo que prolonga una situación irregular que motivó airadas protestas de organizaciones ecologistas que responsabilizan “al lobby sojero” por la demora de su sanción.