EL PAíS › EL CANDIDATO A JEFE DE GOBIERNO DEL PRO SE LA PASA DANDO EXPLICACIONES POR BLUMBERG
El líder de PRO consideró que Juan Carlos Blumberg “reconoció que metió la pata y que se equivocó” al mentir sobre su título de ingeniero. Macri evitó pronunciarse sobre la posible candidatura del hombre que ahora se define como “especialista textil” para la gobernación bonaerense. “Después del 25 veremos”, se distanció.
› Por Santiago Rodríguez
Está claro que Juan Carlos Blumberg no tiene título de ingeniero, pero puede que tenga alguna virtud. Mauricio Macri destacó una que resulta curiosa luego de que el mismo presidente la Fundación Axel admitiera que durante años mintió sobre su nivel de estudios: su “honestidad”. “Reconoció que metió la pata y que se equivocó”, enfatizó el candidato de PRO a la Jefatura de Gobierno porteño y descartó que la mentira de Blumberg vaya a perjudicarlo en la definición del ballottage del próximo domingo. Lo que Macri no se animó a aventurar es si el falso ingeniero sigue siendo una alternativa de su fuerza política para disputar la gobernación de la provincia de Buenos Aires: “Después del 25 veremos”. “Parece ser que todo lo que rodea a Macri es trucho”, arremetió Carlos Heller –compañero de fórmula del kirchnerista Daniel Filmus– y se preguntó si el empresario-diputado se “despegará” de los “problemas de la ciudad” como hace con sus socios caídos en desgracia.
A días de la segunda y definitiva vuelta electoral porteña en la que enfrentará a Filmus, la revelación de que Blumberg se hacía pasar por ingeniero deja a Macri en una situación incómoda, tanto que fue él quien lo presionó para que aclarara en público su situación. El candidato de PRO pensaba en su socio como postulante a gobernador bonaerense y ahora se encuentra dando explicaciones al respecto desde que la verdad sobre su título salió a la luz a fines de la semana pasada.
“Más honesta la respuesta que dio no puede ser”, dijo Macri acerca de las explicaciones que Blumberg brindó durante el último fin de semana y agregó: “Reconoció que metió la pata y se equivocó”.
En el descargo “honesto” que a juicio de Macri hizo públicamente, Blumberg aseguró que nunca firmó ningún papel público como ingeniero. Sin embargo, Página/12 reveló el domingo pasado que bajo juramento se presentó como tal cuando el fiscal federal de la Unidad Antisecuestro Adrián Gentili lo citó en noviembre de 2006 para que diera precisiones sobre los casos de secuestros express y robos que habían llegado a su conocimiento. Este diario expuso también que en el pueblo de Röttingen, en Alemania, donde dijo recibirse, no existe ninguna universidad.
Macri se vio forzado esta vez a referirse al empresario textil durante una presentación de campaña que hizo a la sede de SAME, adonde concurrió junto con su inseparable compañera de fórmula, Gabriela Michetti, y los legisladores macristas Soledad Acuña y Marcos Peña. El propósito de su visita a ese lugar era la presentación de su propuesta para jerarquizar el sistema de emergencia sanitaria de la ciudad, pero no pudo evitar las referencias a Blumberg.
“Si se siente cómodo en ir, ¿por qué no?”, respondió Macri cuando le consultaron si el próximo domingo recibiría al titular de la Fundación Axel en caso de que pase a saludarlo por el lugar donde aguarde el resultado electoral. Esa escena ya tuvo lugar durante los festejos macristas posteriores al cierre de la primera vuelta del pasado 3 de junio. Claro que entonces Blumberg seguía siendo ante los ojos de todos el ingeniero que finalmente resultó no ser.
Macri evaluó que lo de Blumberg no va a perjudicar su desempeño electoral en el ballottage. “La relación de Blumberg no está intermediada por el PRO. La relación es entre Blumberg como líder social y la gente, así que él tendrá que ver si esa relación que tiene con la gente es afectada o no. Con el PRO tiene una relación diferente, que se construyó en base a la militancia de los que estamos en el partido”, fue su análisis.
Al admitir lo que para el candidato de PRO fue una “metida de pata”, Blumberg también dejó en suspenso su eventual postulación en Buenos Aires. “Si Mauricio Macri me lo pide”, señaló al respecto.
A pesar de defenderlo, Macri evitó definir si sigue pensando en él para pelearle la gobernación bonaerense al vicepresidente y candidato K en la provincia Daniel Scioli. “Después del 25 veremos”, se limitó a declarar.
Macri procura ganar tiempo sin definirse no sólo para evitar eventuales complicaciones en la segunda vuelta porteña que puede consagrarlo como el próximo jefe de gobierno, sino también para evaluar cómo continúa la relación de Blumberg con la sociedad. Puestos a pensar si deben mantener o no la sociedad política con el empresario textil, en el macrismo no todos opinan lo mismo: algunos sostienen que es necesario cortar los lazos que los unen y encarar la campaña bonaerense con un candidato propio –Jorge Macri, primo del líder de PRO, ya está anotado en la lista–, mientras otros aconsejan esperar a ver qué dicen de Blumberg las próximas encuestas.
Lo que Macri quiere también es medir el impacto del caso sobre su propia figura. Por más que diga públicamente que no lo perjudica, los macristas temen algún desgaste. No por nada Michetti manifestó también ayer que “debería darse por terminada la discusión” sobre el falso título de Blumberg y pidió “no se mezclen las cosas porque si no el mensaje no llega claro a la gente”. “Lo que tenga que ver con elecciones en otras jurisdicciones –añadió en la misma línea que Macri– será conversado después del 25.”
El tema está instalado por más que los macristas no quieran y sus adversarios no lo evadieron. “Parece ser que todo lo que rodea a Mauricio Macri es trucho”, expresó Heller. En referencia a las dudas que el candidato de PRO sembró en cuanto al futuro de su relación política con Blumberg, recordó que “siempre dije que Macri se despega de los compromisos” y se preguntó: “¿Hará lo mismo con los problemas de la ciudad?”.
También Filmus se refirió al asunto y en relación con Macri afirmó: “Ni lo beneficia ni lo perjudica; ayuda a que se descubra la verdad. Esto no es campaña sucia, es plantear cuál es la verdad, y si alguien se equivocó como (Juan Carlos) Blumberg, hace bien en reconocer que aceptó un título que no tenía”.
Miró a la cámara, obvió a su entrevistador y repitió: “Les pido disculpas, no soy ingeniero, pero no voy a abandonar la lucha”. Juan Carlos Blumberg estuvo ayer en Desde el llano para aclarar que no es lo que se hizo llamar hasta la semana pasada cuando los medios revelaron que ostentaba un título que nunca había obtenido.
El hombre que se transformó en un actor político tras el secuestro y asesinato de su único hijo aprovechó la tardía aclaración sobre su mentira para recordar su vinculación con Mauricio Macri y también que “el oficialismo me ofreció, en su momento, a través del señor (Dante) Dovena ser candidato en sus listas”.
Blumberg, quien el domingo en una entrevista con La Nación dejó de presentarse como ingeniero para refugiarse en un incierto grado de “especialista textil” –”estudié en distintas fábricas sobre construcción de máquinas y plantas”, dijo– destacó que “la gente me pide, me apoya”. El presidente de la Fundación Axel no descartó dar su salto definitivo a la política. Antes se tomará unos días de descanso para “meditar” si podrá remontar el costo de haber dejado el sitial de líder moral para bajar al llano de mentiroso pescado in fraganti.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux