El escrutinio definitivo de las elecciones presidenciales se terminará mañana, pero ya hay un resultado cantado: Cristina Fernández de Kirchner consigue algo más del 45 por ciento de los votos, por encima del 44,92 del escrutinio provisorio. Esto la pone en otra categoría constitucional. Ganó en primera vuelta, no porque le hubiera sacado más de diez puntos de ventaja a Lilita Carrió, sino porque pasó el 45 por ciento de los votos. Así la candidata de la Coalición Cívica hubiera conseguido un 42 por ciento, la senadora igual ganaba en primera vuelta. De los once distritos en los que ya se terminó el escrutinio definitivo, en diez la candidata oficial subió un poco su votación. Son diferencias mínimas, pero por sobre la décima que le faltaba para llegar al 45 por ciento.

El escrutinio provisorio realizado por la empresa española Indra registró con precisión los resultados que están saliendo del escrutinio definitivo. El 28 a la noche se había computado el 96,58 por ciento de las mesas, es decir que quedaba un 3,5 por ciento, y en esa franja faltaron unas 1300 mesas de la Provincia de Buenos Aires, donde Cristina Kirchner sacó el 46 por ciento de los votos. Sólo tomando esas mesas ya la primera dama conseguía superar el requisito del 45 por ciento en la elección nacional.

“En principio, este viernes tendremos los resultados definitivos de todas las provincias”, adelantó el director Nacional Electoral, Alejandro Tullio. El siguiente paso será enviar las planillas a la Asamblea Legislativa, o sea al plenario de todos los diputados y senadores del país. Se supone que antes de fin de mes, la asamblea hará el cálculo numérico y consagrará como presidenta electa a Cristina Fernández de Kirchner, en una sesión conjunta de ambas cámaras, en la que seguramente Cristina estará en su carácter de senadora. Es la primera vez desde la restauración democrática que un legislador en funciones accede a la presidencia.

En el escrutinio definitivo de la Capital Federal no hubo novedades. Elisa Carrió consiguió diez centésimas más de lo que indicaba el escrutinio previo y Cristina Fernández de Kirchner 13 centésimas más de lo que se anunció la noche de la elección. Con el resto de los candidatos no hubo diferencias. Tampoco se verificaron cambios en las cifras definitivas de ausentes, votos en blanco o anulados. No concurrió a las urnas el 25 por ciento del padrón porteño, es decir que faltó un dos por ciento más que en la elección presidencial de 2003.

En el resto de las once provincias en las que se terminó el escrutinio definitivo, la mayor diferencia a favor de Cristina entre el provisorio y el definitivo se produjo en Santiago del Estero: se le había adjudicado el 77,91 por ciento de los votos y el escrutinio definitivo le dio el 79,48, a un paso del 80 por ciento de los votantes. En una provincia poblada como Tucumán, también Cristina consiguió un 0,5 por ciento más de votos. Es sobre esa base, además de las urnas faltantes en Buenos Aires, que superó el 45 por ciento.