El oficialismo intentará responder el cachetazo que recibió la semana pasada en la Cámara alta cuando no pudo conseguir los dos tercios para tratar sobre tablas la prórroga a la Ley de Emergencia Económica. Para cumplir con el trámite de rigor, ayer se constituyó la Comisión de Presupuesto y con su nueva composición se votó el proyecto sobre la Emergencia que llegó de Diputados el miércoles pasado.

La prórroga de la Emergencia había sido remitida por el Ejecutivo al Senado. En el interín y cuando la iniciativa ya había tenido el voto favorable de la comisión en la Cámara alta, los diputados Agustín Rossi, jefe de la bancada kirchnerista, y Alberto Balestrini, por entonces titular de la Cámara baja, copiaron el proyecto y lo pusieron a consideración de los diputados. El miércoles pasado, cuando comenzó la sesión en el Senado, el oficialismo tenía dos proyectos idénticos para poner en consideración. No habría tenido inconveniente en proponer votar el que había llegado del Ejecutivo. Los radicales ya habían firmado el dictamen. Si lo hubiera hecho, se habría dado una situación bastante extraña. Dos proyectos idénticos tendrían media sanción. Para evitarlo, el jefe de la bancada oficialista en la Cámara alta, el rionegrino Miguel Angel Pichetto, tuvo que relegar la iniciativa del Gobierno y proponer votar lo enviado por los Diputados. Para eso necesitaba los dos tercios de los votos para tratarlo sobre tablas. No tenía los números favorables y la movida fracasó. No fueron pocos los que responsabilizaron a Rossi por el apuro que terminó demorando la sanción. De hecho, el miércoles pasado por la mañana, antes de la sesión, la Presidenta se reunió con el jefe de Gabinete Alberto Fernández, con Ro-ssi y con Pichetto. Rossi negó la reunión que había sido confirmada por Pichetto. Ello llevó a especular que Rossi había sido reprendido por el Ejecutivo. Ayer, cuando el tema volvió a discutirse en comisión, Pichetto se encargó de subrayar la extraña movida de los diputados. No dudó en calificarlo como “un hecho equivocado, erróneo y lamentable que no tiene precedentes”. También lo definió como “un hecho inexplicable”. Más adjetivos no pudo emplear. La composición de la Cámara alta se modificó favorablemente para el oficialismo y desde ayer le falta tan sólo un voto para obtener los dos tercios. En la anterior sesión, en boca del mendocino Ernesto Sanz, el radicalismo comprometió su apoyo para discutir la emergencia.