Desde Nueva York

“Las empresas que más han crecido en producción, creatividad, exportación y números han sido todas aquellas vinculadas a las tecnologías de la información y las telecomunicaciones”, dijo Cristina Kirchner, elogiando los recursos humanos con que cuenta la Argentina ante los directivos de las empresas más importantes que cotizan en el Nasdaq. Poco antes había cerrado la jornada en la bolsa de comercio tecnológico más importante de Estados Unidos, mientras su imagen era proyectada a lo largo de los siete pisos del edificio, a la vista de los apurados neoyorquinos que caminaban por Times Square, casi en el cruce con la famosa diagonal Broadway.

La Presidenta cumplió estrictamente con los tres minutos que tenía para hablar ante las cámaras que, a través de cientos de canales, cada día transmiten el cierre del mercado de valores. Desconfiados, previendo que se extiendan un poco más de lo estipulado, los organizadores del Nasdaq hacen arrancar antes a sus invitados, porque a las 16, sí o sí, la bolsa se cierra con aplausos televisados. A CFK le sobraron unos minutos, que hubo que rellenar haciendo que las autoridades del Nasdaq se sacaran fotos con la presidenta argentina. Así llegaron a los aplausos del final, inexorables aunque casi todas las acciones estuvieran, como ayer, en baja. Después de todo, si la bolsa es una ruleta, el principal impulso del apostador es el optimismo.

Fue después del cierre que Cristina Kirchner dio una conferencia ante presidentes y CEO de compañías como Cisco, Microsoft, Intel, Yahoo, Verizon, Boeing, Dell, Blackberry, Sabre Holdings, Medtronics, Intelsat, Motorola, Nextel, Oracle, entre muchas otras tan importantes, aunque menos conocidas en la Argentina.

La Presidenta expandió entonces los mismos conceptos que había apretado en los tres minutos televisados, que tuvo como eje convencerlos de las buenas condiciones que hay en Argentina para que estas empresas vengan a invertir o, las que ya están, aumente su apuesta. “¿Por qué?”, les preguntó, “en estos cinco años” crecieron más las empresas relacionadas con la informática y las comunicaciones: “Por el increíble recurso humano que tiene la República Argentina, altamente calificado para este tipo de empresas, que exigen innovación, tecnología y creatividad”, dijo.

Alrededor de cuatro largas mesas que formaban un rectángulo, la Presidenta estuvo acompañada por el canciller Jorge Taiana; el ministro de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao; el secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, los gobernadores de Chaco, Jorge Capitanich, y Santiago del Estero, Gerardo Zamora; los embajadores ante Estados Unidos, Héctor Timerman, y la ONU, Jorge Argüello; y el intendente de Avellaneda, Baldomero “Cacho” Alvarez.

En su exposición, la Presidenta volvió a resaltar el crecimiento sostenido de la economía argentina, el “superávit gemelo” (fiscal y comercial) y otros indicadores macroeconómicos positivos, así como detalló todos los pasos del desendeudamiento durante la gestión de Néstor Kirchner y que ella intenta continuar con la decisión de pagarle al Club de París y con lo que había anunciado un rato antes, a 25 de cuadras de allí, respecto de los bonistas que no entraron en el canje de 2005.

Después hubo una breve ronda de preguntas que apuntaron al apoyo del Estado a empresas tecnológicas. En sus respuestas, CFK resaltó que aumentó el 40 por ciento de lo presupuestado para respaldar este tipo de emprendimientos, y que ya supera el financiamiento externo para el sector, aunque admitió que aún era poco, ya que estaba en el 0,5 por ciento del total.