La presidenta Cristina Fernández de Kirchner aseguró que “la incansable lucha de las Abuelas de Plaza de Mayo fue fundamental para derribar el muro de impunidad en la Argentina”, y subrayó que “el coraje, el valor y la perseverancia de las Abuelas ayudaron a recrear la esperanza y la vida”. La Presidenta encabezó ayer un homenaje a las Abuelas de Plaza de Mayo en la sede de las Naciones Unidas que contó con la presencia del titular de la ONU, el coreano Ban Ki-Moon, y del presidente de Letonia, Valdis Zatlers. Estela de Carlotto, presidenta de la institución, estuvo acompañada por los nietos recuperados Victoria Donda, diputada nacional, Gabriel Cevasco, Ximena Vicario y Pedro Luis Nadal García. “En Estela Carlotto quiero simbolizar el homenaje que los argentinos les debemos a estas mujeres que con un pañuelo blanco en la cabeza se atrevieron donde nadie se atrevía y lograron tal vez lo que nadie hubiera logrado”, dijo la Presidenta.

Junto a CFK estuvieron el ex presidente Néstor Kirchner, el canciller Jorge Taiana y el embajador ante las ONU, Jorge Argüello. “En mi banca de senadora, cuando me tocó votar contra las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, que eran el muro de la impunidad, recuerdo que dije que, tal vez, si lo que les pasó a ellas me hubiera pasado a mí, a lo mejor no hubiera tenido esa serenidad ni esa paz”, recordó Cristina Kirchner.

Carlotto agradeció el homenaje y destacó que siempre tuvieron el apoyo de la ONU. “Por eso digo que estar aquí hoy para nosotras, exhibiendo una muestra gráfica y acompañada por cuatro nietos recuperados, es un sueño que se hizo realidad”, señaló.

“Es algo paradójica nuestra venida aquí, porque las Abuelas presentaron en la ONU las denuncias sobre nosotros, y hoy estamos acá físicamente para decir que fuimos desaparecidos”, reflexionó Gabriel Cevasco, uno de los nietos que participó del acto. Cevasco fue secuestrado junto con su madre el 11 de noviembre de 1976, cuando tenía 3 meses. Fue a parar a la Brigada de San Martín y entregado a una pareja “que no podía tener hijos”. Recuperó su identidad en octubre del 2000. “Ese día me conocí a mí mismo”, aseguró.

“Es muy bueno que tantos mandatarios y personalidades participen hoy del evento, y ojalá que se pueda difundir y llegar a todos los (nietos) que están faltando recuperar”, aseguró, por su parte, Pedro Luis Nadal García, que tiene 33 años y recuperó su identidad en 2004.

“Tengo claro que lo único que te hace libre es la verdad”, dijo Donda. La diputada agregó que sentía “algo muy fuerte” porque “recuperar a los nietos no es sólo eso, sino es mucho más, es recuperar personas, la identidad de ellos y la de un pueblo”.

Carlotto explicó los jóvenes que participaron del homenaje fueron elegidos para venir a Nueva York porque ya tiene su historia elaborada y porque la situación de su documentación está correcta, ya que muchos nietos apropiados están tramitando sus documentos definitivos.