En la ciudad de Buenos Aires, casi todas las listas opositoras proponen la puesta en vigencia de la Ley de Comunas y la convocatoria a elecciones para elegir a sus representantes. Así lo expresan el kirchnerista Encuentro Popular para la Victoria (EPpV), Proyecto Sur (P. Sur), el ibarrista Diálogo por la Ciudad (DpC), el Partido Socialista (PS) porteño, el Partido Obrero (PO) y los frentes de izquierda (MST-MIDJ e IU y PTS, MAS e IS). Pero el oficialismo macrista no tiene en cuenta la implementación de la ley, ni siquiera la nombra en su propia plataforma electoral. El Acuerdo Cívico y Social (ACyS) no lo incluye en su plataforma porque ha elaborado una propuesta nacional (“porque la elección es legislativa y nacional”), que no contempla las cuestiones específicas de cada distrito. La plataforma del PRO enumera una larga lista de reclamos al gobierno nacional: “la creación de policía y justicia propia”, el traspaso del puerto de Buenos Aires, la “descentralización” de entes nacionales e “igual tratamiento que el resto de las provincias”, intervención directa en el transporte y el juego de azar. Además de la delegación del Estado Nacional a la Ciudad de las atribuciones para “el saneamiento del Riachuelo” y la autorización para construir la “autopista ribereña”. El resto de la oposición comparte el avance en la “autonomía” porteña aunque con mucho reparos a la política de Mauricio Macri. Sin embargo, esta vez el kirchnerista EPpV también propone el traspaso a la ciudad del puerto de Buenos Aires: el más importante del país, uno de los pocos que quedan en manos del Estado y que recauda decenas de miles de millones de dólares al año. Una postura que no comparten ni P. Sur ni los partidos de izquierda, y probablemente tampoco el gobierno nacional.