“La Argentina necesita ideas, propuestas, hacer cosas, y no gente a la que le gusta judicializar la política”, dijo Néstor Kirchner en su recorrida de campaña del día. Ayer eligió la localidad bonaerense de Esteban Echeverría, donde lo recibió el intendente Fernando Gray, ex funcionario del Ministerio de Desarrollo Social. Durante su caminata, Kirchner volvió a cuestionar a los representantes del sector agropecuario que organizaron escraches contra Daniel Scioli y el jefe del bloque K en Diputados, Agustín Rossi.

“A lo largo de la historia siempre hicieron lo mismo”, cargó. “No se trata de los productores, sino de algunos pocos inadaptados”, aclaró después.

La caminata del candidato a diputado comenzó en un centro asistencial, se extendió por las cuatro cuadras del centro comercial más grande del municipio, incluyó la visita a algunas casas de familia y a una parrilla, y terminó en un centro de jubilados, que a esa hora estaba lleno de socios. Los viejitos recibieron a Kirchner con euforia, agitando banderas argentinas.

Durante una recorrida similar por Cañuelas, el lunes Kirchner había comparado el accionar de los ruralistas con las presiones que el poder económico solía ejercer sobre los gobiernos civiles través de las fuerzas militares. “Cambiaron tanques por tractores”, deslizó. Su crítica iba dirigida en particular al presidente de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati. Ayer, Kirchner volvió a referirse a los escraches organizados por grupos de ruralistas, aunque buscó restarle importancia a la representatividad de esas expresiones. Dijo que los responsables del episodio vivido por Scioli habían sido “unos pocos inadaptados”. El ex mandatario y titular del PJ llegó a Esteban Echeverría acompañado por el ministro del Interior, Florencio Randazzo, y la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner. “Les quiero traer el saludo de alguien que quisiera estar aquí con ustedes, la compañera Cristina. Si no les dejo este saludo, no me deja a entrar a casa”, dijo.

Como en sus últimas actividades de campaña, el ex presidente eligió el contacto directo con la gente. Por ejemplo, durante su caminata por la avenida Restelli –de las más importantes de Echeverría– entró en una casa para tomar unos mates con el propietario que lo había invitado a compartir una ronda de amargos. Fue ahí donde opinó sobre las protestas que sufrieron en los últimos días Scioli y el santafesino Rossi.