La Asociación de Abogados Laboralistas respaldó los reclamos de los trabajadores despedidos de Kraft Foods porque, según dijo, “defienden sus legítimos derechos, para lo cual se han organizado internamente con democracia y libertad para elegir a sus representantes”. La entidad afirmó que “la respuesta de la empresa ante el justo reclamo de los trabajadores ha sido el despido como represalia, como extrema conducta discriminatoria, la violación de las normas que rigen las relaciones laborales en nuestro país y la mentira permanente como forma de confundir a la opinión pública”, al tiempo que cuestionó al Estado nacional y provincial por haber permitido “durante más de 40 días que la empresa llevara adelante esta política”. El Frente Grande también apoyó a los despedidos de la ex Terrabusi. “Repudiamos profundamente la provocadora maniobra de la empresa y los sectores más reaccionarios de las patronales del sector”, manifestó esa agrupación. Y desde Córdoba, la diputada Liliana Olivero (Izquierda Socialista) se volvió a solidarizar con los trabajadores de Kraft. “Si hay despidos y bajos salarios, habrá luchas y cortes”, dijo.