Familiares de los Pomar se manifestaron “defraudados” con la investigación del caso y pidieron que se determine por qué la Justicia y la policía demoraron 24 días en hallar los cuatro cadáveres en una zona de montes de la ruta provincial 31. “Me siento muy defraudada”, dijo conmocionada María Cristina Robert, madre de Viagrán, quien objetó: ¿Cómo puede ser que en 24 días no hayan registrado nada?”. Por ello, pidió “que se investigara por qué motivo no encontraron antes a esta familia, por qué motivo esperaron tanto para encontrarlos”, al tiempo que expresó sus quejas porque “ninguna autoridad” le comunicó el hallazgo y se enteró por un llamado de un canal de televisión.

En tanto, Romina Abatte, abogada y amiga de la familia Pomar, sostuvo que hay “situaciones demasiadas raras” en el marco del caso, aunque dijo que hay que “esperar el resultado de las autopsias y pericias”.

Por su parte, el abogado de la familia Pomar, Carlos Ferreyra, afirmó que si los cuerpos no fueron encontrados antes es porque nunca se hicieron rastrillajes en la ruta 31, cercana a Salto, o porque “la escena fue plantada”. El letrado sostuvo que “los tres caminos posibles que llevan a Pergamino son la ruta 31, la 41 y la 51, las cuales debían haber sido rastrilladas desde el primer día”, lo cual implicaba ir “a los lugares más ocultos, no a los que están a la vista de todo el mundo”.

“Nuestra preocupación es la siguiente: si han rastrillado esa zona ocho veces, yo no quiero decirle a la fiscal (Karina Pollice) lo que tiene que hacer, pero que se llame con nombre y apellido a quienes participaron de ese rastrillaje para que informen si pasaron por ese monte”, dijo el letrado. Para el abogado, “hay dos alternativas, o nunca pasaron por ahí o el auto y la escena están plantados”. “Cualquiera de los dos temas son de enorme gravedad, entonces acá no se trata de disfrazar responsabilidades, sino de asumirlas, y no-sotros vamos a poner peritos de parte para controlar que esto sea así”, explicó. Ferreyra consideró que la familia Pomar “fue víctima de una mala, pésima, investigación” y pidió que ahora “las cosas se hagan con prolijidad”.