La delegación que crearon el lunes las bancadas opositoras en el Senado para reunirse con el jefe del bloque K, Miguel Angel Pichetto, en busca de un acuerdo que habilite una sesión en la Cámara alta para tratar los decretos de necesidad y urgencia (DNU) no tuvo los resultados que esperaba. Aunque admitieron “algún tipo de comunicación” con el oficialismo, los voceros de la oposición afirmaron que “no se pudo concretar ningún encuentro”. Sin embargo, volcaron todas sus expectativas en la reunión que hoy por la tarde mantendrá la Comisión Bicameral de Seguimiento de Trámite Legislativo, de la que Pichetto es miembro, para producir un acercamiento con el oficialismo.

Tras asistir a la convocatoria opositora de Julio Cobos en el Senado, los distintos bloques designaron al radical Gerardo Morales, la peronista disidente Liliana Negre de Alonso y al díscolo peronista pampeano Carlos Verna para “dialogar” con el oficialismo. “Al sólo efecto de establecer una agenda parlamentaria para proceder al tratamiento en el pleno de las resoluciones pertinentes para ratificar o rechazar los DNU”, dice uno de los cinco puntos del comunicado conjunto que redactaron en el despacho del vicepresidente.

Pero los resultados de ayer no fueron alentadores. Los tres senadores intentaron algunos contactos, pero no pudieron avanzar en la idea de pactar un encuentro con el jefe del bloque oficialista, ante la negativa de Pichetto. El rionegrino fue uno de los primeros legisladores kirchneristas que salieron al cruce de la embestida opositora para sesionar durante el receso parlamentario y a desautorizar a Cobos para realizar la convocatoria a una reunión “de Labor Parlamentaria”, que los propios participantes después calificaron como de “presidentes de bloque”.

Morales, Negre de Alonso y Verna confían en que hoy podrán tener un aparte con Pichetto antes o después de la reunión de la Comisión Bicameral –que se reunirá hoy a las 17 en el salón Illia del Senado–, donde oficialistas y opositores volverán a cruzar argumentos y acusaciones mutuas antes de emitir dictamen sobre el DNU del Ejecutivo que desplazó a Martín Redrado de la presidencia del Banco Central. Aunque coinciden en que no será el mejor ámbito para un encuentro, la delegación opositora espera gestar un acercamiento.

En el oficialismo, en cambio, consideran que Pichetto no cambiará de opinión y sólo revisaría esa postura si el Gobierno decidiera cambiar de estrategia parlamentaria. Algo, que por ahora, tampoco parece probable.