Además de compañero de fórmula de Carlos Menem, el gobernador de Salta, Juan Carlos Romero, ocupa el cargo de secretario de Interior del Consejo Nacional del Partido Justicialista cuya sede de Matheu 130 fue atacada ayer a la madrugada.
–¿De dónde cree que viene este atentado?
–La verdad, no tengo idea. No creo que vengan de la política, no tienen que ver con la interna radical ni justicialista. Justamente, sectores externos a los partidos pueden estar interesados en agrandar o alentar nuestras diferencias internas con este tipo de acciones. Creo que las razones hay que buscarlas por allí.
–¿Descarta totalmente que sea culpa del internismo político?
–Sí, primero porque por la sincronización de los atentados no sería lógico. Además, es evidente que lo que este accionar busca justamente es que en una reacción rápida nos equivoquemos y le echemos la culpa a un adversario interno.
–¿Y a qué sectores de fuera de la política atribuiría este hecho?
–Durante su historia, el justicialismo ha sido víctima de persecuciones y hechos de violencia que a veces se repiten. Sobre todo ahora, que las encuestas muestran que el justicialismo tiene cada vez más posibilidades de colocar al próximo presidente, eso puede resultar muy molesto a algunos sectores ya sea de extrema izquierda como de extrema derecha.
–¿Piensa que hechos de este tipo pueden repetirse durante la campaña?
–Lo principal para que no se repita es que el Gobierno, que cuenta con los medios para hacerlo, profundice la investigación y esclarezca el hecho. Para eso, ayudaría que se resuelvan otros atentados recientes como el que sufrió Estela Carlotto en La Plata y también los que hicieron contra locales de la lista Azul y Blanca del PJ en la provincia.