La corporación de los jueces es otra de las puertas de entrada posibles al Consejo de la Magistratura para el radicalismo. Sus Señorías de todo el país eligen a tres representantes consejeros el 15 de septiembre, dos por Capital Federal y uno por las provincias. La lista Bordó, que encabeza el camarista Ricardo Recondo, radical de pura cepa, lleva como postulante del interior al juez federal de Córdoba Alejandro Sánchez Freytes, quien fue denunciado la semana pasada por haber ordenado el pago de una jubilación extraordinaria a un imputado de delitos de lesa humanidad en la última dictadura por el “perjuicio psíquico” que le causó la divulgación de acusaciones en su contra. La lista contrincante es la Celeste, que lidera el camarista laboral Mario Fera.

A juzgar por los números de la última elección de consejeros jueces, donde la lista Bordó ganó por una diferencia de 8 votos (50, 5 por ciento contra 49,5), lo más probable es que entren al Consejo tanto Recondo como Fera. El que junte más voluntades pondrá a su consejero del interior del país. Junto con Fera va Leónidas Moldes, juez federal de Bariloche. Junto con Recondo, el cuestionado Sánchez Freytes, denunciado el jueves último por “mal desempeño” ante el propio Consejo por la Unión de Empleados de la Justicia con apoyo de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora por su presunta complicidad con acusados por crímenes dictatoriales. Sánchez Freytes es subrogante en causas sobre violaciones a los derechos humanos en el ámbito del III cuerpo del Ejército. La presentación le cuestiona un beneficio indemnizatorio que le concedió a Luis Alberto Manzanelli, procesado e implicado en diez causas de derechos humanos.

Recondo, quien preside la Asociación de Magistrados hasta noviembre, dice desde hace varios años que el Gobierno persigue a los jueces y que el oficialismo usa las causas en el Consejo para presionarlos. De ahí, explica, su enorme interés por integrar el Consejo de la Magistratura. “La denuncia contra Sánchez Freytes es mal intencionada, es un tema político. Si no fuera candidato al Consejo no lo hubieran denunciado”, le dijo Recondo a este diario. “El propio Ejército lo había indemnizado, con el 75 por ciento. Lo que le dio el juez fue ciento por ciento y para colmo luego la Cámara lo volvió a bajar”, añadió, y aclaró que la candidatura de Sánchez Freytes sigue en pie. La lista de suplentes para consejeros jueces del interior de la lista Bordó tiene nombres conocidos, entre ellos el de la jueza Olga Pura de Arrabal, la mendocina que suspendió la aplicación con efectos generales de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, duramente criticada luego por la Corte Suprema. Entre los jueces suplentes de Capital también hay algunos con cierta fama, por ejemplo, la jueza en lo Contencioso-Administrativo María José Sarmiento, que impidió el uso de las reservas para pagar la deuda y ordenó restituir a Martín Redrado en el Banco Central.

Fera, el líder de la lista Celeste, es un ex secretario letrado de la Corte, actual presidente de la Cámara del Trabajo. El kirchnerismo lo avala: lo ven como “el mal menor” dentro de un ámbito “cerrado y corporativo” como es el de los jueces, dice un operador K. En sus declaraciones y discursos se muestra abierto al diálogo con los estamentos políticos y judiciales. Menos confrontativo, pero fiel a los suyos, dice que quiere “recuperar la representación de los magistrados”. Al Diario Judicial le dijo que una entrevista que tuvo con monseñor Bergoglio es “el punto de partida de su agenda”.