Peritos de Gendarmería Nacional hallaron cartuchos de municiones de plomo disparados por escopetas o Itakas en el interior del Parque Indoamericano, una vez desalojado por sus ocupantes. Los nuevos elementos de prueba fueron recolectados el miércoles por la mañana, antes de que las brigadas de limpieza del gobierno porteño procedieran a fumigar y sacar la basura del predio.

Justamente, el fiscal Sandro Abraldes les pidió a funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que suspendieran los trabajos de limpieza del parque para evitar la pérdida de pruebas e indicios del accionar de la policía que todavía puede haber en el lugar.

Los cartuchos secuestrados por Gendarmería coinciden en morfología y características de disparo con los que aportaron decenas de testigos de los ocupantes que declararon ante la fiscalía de Abraldes y el juez Luis Otero.

Los testigos acusaron a la Policía Federal de haber disparado con munición de plomo a los ocupantes durante la primera escena de represión para el desalojo, a principios de la semana pasada, cuando hubo dos muertos.

El fiscal Abraldes, a cargo de la investigación por esos homicidios en el Parque Indoamericano, recorrió ayer a la mañana el lugar y realizó junto con Gendarmería Nacional los trayectos de los disparos que mataron a Bernardo Salgueiro, Rosemarie Chura Puña y Juan Castañeta Quispe.

Abraldes estuvo en el parque y en la villa 20 de Soldati desde las 7 hasta el mediodía y analizó los lugares donde cayeron muertas las tres víctimas con el testimonio de vecinos del lugar que le relataron cómo fueron los hechos.