La Presidenta dijo que había que buscar algún mecanismo para que los graduados universitarios le devuelvan a la sociedad todo lo que recibieron gracias a una educación gratuita. ¿Se está pensando en algo concreto?

–Los sectores pobres pagan una educación a la que todavía no pueden acceder: una deuda que tenemos como sociedad es que los pobres puedan acceder a la universidad pública. Estamos abriendo el espectro. La Presidenta recordó que buena parte de los alumnos de las universidades nuevas, el 60 por ciento promedio, es primera generación de estudiantes universitarios. La idea de la Presidenta es muy potente. Cómo agradecemos los graduados universitarios lo que la universidad pública nos dio. No tiene nada que ver con un arancel sino con seguir profundizando el carácter público y gratuito de la universidad, una devolución de cara a una sociedad más solidaria.

–En 2011, año electoral, ¿se va a avanzar en la nueva ley de educación superior?

–Vamos a ver. Se verá cuál es el momento y las mejores condiciones. El Presupuesto pasó del 0,5 del PBI al 0,9 del PBI. Los salarios docentes y no docentes han crecido entre el 570 y el 600 por ciento. La universidad está creciendo.