Estos son algunos de los elementos planteados ayer en el protocolo sobre de trata de personas. El delito se refiere al rapto o engaño o coacción de personas que están en situación de vulnerabilidad para explotarlas a cambio de dinero.

- Si se trata de una persona extranjera, de inmediato debe darse intervención a la Dirección Nacional de Migraciones.

- En ningún caso la víctima podrá ser detenida.

- Se utilizará personal especializado, fundamentalmente femenino.

- La seguridad de la víctima será la consideración suprema en todo momento.

- En los procedimientos, se hará un uso racional de la fuerza.

- Se respetará la privacidad de la víctima, estando prohibido dar a conocer su identidad o su fotografía.

- Las víctimas tendrán derecho a la asistencia médica y psicológica.

- Se establece, para cada caso, que las fuerzas de seguridad deben ingresar primero al local donde se está cometiendo el delito, que las víctimas deben ser inmediatamente separadas y dejadas en manos de personal especializado y se impedirá todo contacto entre víctimas e imputados. En el caso de un prostíbulo, por ejemplo, no se permitirá que las chicas sean abordadas por los dueños o explotadores del lugar.

El texto del protocolo es de once páginas y tiene indicaciones detalladas.