Con la incorporación del Partido Socialista y el GEN, Fernando “Pino” Solanas logró ampliar el frente de centroizquierda que respalda su candidatura a jefe de Gobierno porteño y avanzó un casillero en la construcción de un frente electoral que contenga a las mismas fuerzas políticas en las presidenciales de octubre. Pero el cierre del acuerdo frentista en la Ciudad tampoco fue fácil ni ajeno a fricciones dentro del Movimiento Proyecto Sur, que conforman otros cinco partidos: Proyecto Sur, Unión Popular, PSA, MST y Libres del Sur. El socialismo insistió hasta último momento en armar una colectora para apoyar a Solanas y que también contuviera a la UCR, pero ante la negativa del entorno del cineasta los radicales quedaron afuera del acuerdo (ver página 3). Los lugares asignados a las distintas fuerzas en la lista de candidatos también tensó la relación con Libres del Sur, que casi termina en ruptura.

“Este acuerdo sienta las bases para construir una opción seria y concreta al modelo neoconservador de Mauricio Macri y a las variantes del bipartidismo que ha venido gobernando en las últimas décadas. La alternativa que encabeza el Movimiento Proyecto Sur sienta un precedente para que otras fuerzas y organizaciones sociales se integren a esta nueva alternativa”, sostuvo Solanas tras las arduas discusiones para sellar el frente electoral. Una postura que también apunta a cerrar un frente electoral que en octubre incluya al socialismo y el GEN.

La Unidad Popular que lidera Víctor De Gennaro también festejó el acuerdo. Apuestan a que el socialismo y el GEN se despeguen definitivamente de un posible acuerdo nacional con la UCR y converjan en un frente en el que también incluyen al cordobés Luis Juez. “Se ha logrado un verdadero frente amplio por fuera de las estructuras nacionales del bipartidismo”, agregó Claudio Lozano, diputado del espacio.

Pero el acuerdo no estuvo exento de dificultades. Quien era candidato a jefe de Gobierno porteño del PS, Roy Cortina, propuso armar una colectora que bajo el rótulo de Frente Progresista apoyara a Solanas y que incluyera al GEN y la UCR. Pero el rechazo de Solanas a incorporar al radicalismo terminó por derrumbar la propuesta. El PS y el GEN decidieron plegarse individualmente al frente del cineasta, lo que dejó huérfana a la UCR. “Le explicamos al radicalismo que esto es un acuerdo de distrito y que por lo tanto no tiene implicancias respecto de lo que pueda acordarse para octubre”, aseguró Cortina a Página/12. Sin embargo, existió un mensaje desde Santa Fe impulsando a los socialistas porteños a cerrar con Solanas (ver página 3).

El acuerdo también asignó lugares en la lista para cada una de las fuerzas. La incorporación del PS y el GEN desplazó a Libres del Sur a lugares poco expectantes y desató una dura discusión. “Fueron discusiones propias de los cierres de lista”, trató de minimizar Humberto Tumini a este diario. Pero fue necesario que otros partidos mediaran para evitar una ruptura.