La policía detuvo ayer en General Roca a dos personas que merodeaban una escuela portando boletas adulteradas del Frente para la Victoria. La policía local informó que los detenidos llevaban boletas del FPV que tenían el número adulterado en el tramo de gobernador y vice, donde figuraba el 499 en lugar del correcto 409. Un rato antes, el candidato del FpV, Carlos Soria, había denunciado irregularidades de este tipo y las había atribuido a “sinvergüenzas de la Unión Cívica Radical” en el contexto de una “continuidad de agresiones producidas durante toda la semana”. Por su parte, el gobernador Miguel Saiz, luego de sufragar, opinó que las acusaciones de Soria son “denuncias muy graves sin sustento legal” que implican la comisión de fraude electoral. “De ahí a que hayamos sido nosotros los que hicimos eso, hay un paso bastante largo”, se atajó el mandatario. El candidato peronista, que se impuso cómodamente en el comicio, anticipó que los apoderados del partido “ya presentaron la denuncia en la Justicia Electoral provincial” y agregó que el Tribunal garantizó que los votos emitidos con la errónea impresión en la boleta “serán válidos”.