El dirigente de camioneros y secretario general de un sector de la CGT, Hugo Moyano, reafirmó su posicionamiento como opositor al gobierno nacional en un acto por el 60° aniversario de la muerte de Evita que se realizó a puertas cerradas en el edificio de la central obrera. Allí, volvió a criticar a la presidenta Cristina Kirchner, a quien contrapuso con la “humildad” de Evita. Durante el encuentro, Moyano también se refirió a los gremios que rechazan su conducción de la CGT como “una bolsa de gatos” y reiteró sus reclamos de suba del mínimo no imponible y universalización de las asignaciones familiares, a los que les agregó el de un salario mínimo de 3500 pesos.

“Si defender los derechos de los trabajadores es ser opositor, soy opositor”, se jactó el camionero, rodeado de sus socios más fieles en el Salón Felipe Vallese del edificio de Azopardo. Se refirió a los funcionarios y dirigentes que lo criticaron en los últimos días, a quienes tildó de “progresimios” y los acusó de “hipocresía e ignorancia”. Incluso llegó a referirse al ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, como “Pantriste”.

También le respondió a quienes lo acusaron de seguir ambiciones personales: “Las ambiciones que tengo son que el trabajador tenga la dignidad que le corresponde, por esa ambición voy a luchar toda mi vida. Mis limitaciones son que todavía no he podido comprender el significado de la sintonía fina. A lo mejor, la sintonía fina es limitar el reclamo legítimo de los trabajadores, pero voy a seguir peleando”, advirtió.

Por último, destacó la figura de Eva Perón, “alguien que hizo tanto por los trabajadores y por los que menos tienen”. Uno de sus principales logros, destacó, fue generar “la conciencia en los trabajadores de lo que le corresponde” y que por eso no dejaría de pelear por sus reivindicaciones. En ese momento también hizo una comparación con la actual Presidenta: “Evita tenía una firmeza tremenda para defender a los ‘cabecitas negras’, a los humildes, pero la desbordaba la humildad. Cuando alguien tiene esa soberbia que se desborda, es difícil imitar a Evita, porque es la contracara de la humildad”.