Seis de cada diez personas considera que es correcta la actitud del presidente Néstor Kirchner de abrir las puertas para que la Justicia intervenga en la cuestión militar, mientras que es muy minoritaria la postura de que “no se debe volver atrás de algo que ya está resuelto”. La misma proporción está de acuerdo con la posibilidad de extraditar a los militares y considera que las extradiciones no afectan la soberanía. “Tal vez si la propuesta viniera sólo de una organización de derechos humanos o de un partido de izquierda, el nivel de aceptación sería menor –señala la consultora Analía Del Franco–. La gente respeta la opinión de un Presidente que registra el 90 por ciento de imagen positiva. Pero ya antes de Kirchner hubo una postura mayoritaria en la sociedad de que todos deben ser sometidos a la Justicia. Y eso se vio muy claramente cuando el 75 por ciento rechazó los indultos a Mohamed Alí Seineldín y Enrique Gorriarán Merlo. Y ni hablemos del rechazo hacia el indulto a los ex comandantes”.
Estas conclusiones surgen de dos encuestas realizadas, una por la consultora Analogías que preside Analía Del Franco, y la otra por la consultora Equis que encabeza Artemio López. La primera evalúa respuestas de 400 personas de Capital Federal y Gran Buenos Aires. En la de Equis, se procesó la opinión de 960 personas, también en Capital Federal y Gran Buenos Aires. En ambos estudios se respetaron las proporciones por edad, sexo y nivel económico-social. La pregunta de Analogías estuvo dirigida a percibir si la gente quiere ponerle un punto final a la cuestión militar o si está de acuerdo en revisar la actitud de que no sean juzgados por las atrocidades cometidas. La respuesta mayoritaria es que “se debe rever el tema de los militares ya que hay cuestiones pendientes”. En otras palabras, que se debe ir hacia adelante con el juzgamiento.
“No tengo dudas de que parte del respaldo a retomar el tema militar tiene que ver con el impresionante apoyo que hoy tiene Néstor Kirchner -señala Del Franco–. A la gente le ha impactado el estilo directo, franco, tomando el toro por las astas y enfrentando los problemas. Eso lo ha llevado a niveles de imagen positiva nunca vistos en los últimos años. Tomado nacionalmente, tenemos registros de 88 por ciento de opiniones favorables al Presidente. Con ese trasfondo, es lógico que la gente vea con buenos ojos la mayoría de sus iniciativas. Si los pasos fueran dados por otros, tal vez se hablaría de revanchismo, pero no perdamos de vista que el juzgamiento de los militares siempre tuvo el acuerdo de una mayoría. No tan amplia como ahora, pero una mayoría. Y los indultos, han tenido un rechazo abrumador en todos los casos.”
Los datos aportados por Equis son similares y se sustentan en lo mismo. La amplia mayoría de los consultados están a favor de que los militares con causas pendientes sean extraditados, algo que va en el sentido del decreto firmado por Kirchner el viernes. Sólo el 27 por ciento se manifiesta en desacuerdo. Con porcentajes semejantes, 59 por ciento, la gente rechaza que las extradiciones afecten la soberanía nacional. Detrás, está esencialmente el apoyo a una medida tomada por Kirchner. No obstante, tanto Del Franco como López consideran que la gente estaría aún más de acuerdo en que los militares fueran juzgados en la Argentina.
“Hay un fenómeno llamativo –sostiene Del Franco–. En los últimos meses ha mejorado la imagen que los ciudadanos tienen de la Justicia e incluso de la Cámara de Diputados. Es una especie de ola de optimismo que lleva al hombre común a pensar que aun en esos ámbitos, tan criticados, se está haciendo algo. No es que ahora todos se convirtieron en Gardel. La Corte Suprema, por ejemplo, tenía un dos por ciento de aprobación hace dos meses y ahora trepó al 11. O sea que Justicia, partidos y legisladores siguen siendo muy criticados, pero dentro de eso aparecen mejor ante los ojos de la gente. Y consecuentemente se piensa que las instituciones deben funcionar como corresponde. El juzgamiento de los militares es percibido justamente como algo que corresponde”.