“Lamentablemente no me sorprendió”, dijo ayer el gobernador de Buenos Aires, Felipe Solá, en referencia a la participación de policías bonaerenses en los secuestros de Rubén Astrada y del comerciante Juan Carlos Cirelli. En un acto en la Escuela de Gendarmería Nacional, en Ciudad Evita, Solá señaló que no descarta la posibilidad de que un civil sea designado en la jefatura de la Bonaerense.
“Es muy desagradable la circunstancia de que dos suboficiales de la policía estarían implicados o por lo menos comprometidos” en el secuestro del padre del futbolista Leonardo Astrada, afirmó ayer Solá en un acto por el 65º aniversario de la Gendarmería Nacional, en el que también participaron el ministro de Seguridad, Gustavo Beliz; el secretario de Seguridad, Norberto Quantín, y el jefe de la Gendarmería, Eduardo Luis González. “Los implicados son implicados, sean civiles o policías, no hacemos distingo de ningún tipo”, agregó el gobernador.
El viernes pasado fue detenido el suboficial de la bonaerense Eduardo Correa como presunto integrante de la banda que secuestró a Astrada y a Cirelli y, tal como anticipó este diario, también habría otro suboficial y tres oficiales más que estarían involucrados en los secuestros.
Solá dijo además que no descartaba que un civil reemplace al relevado comisario Alberto Sobrado como jefe de la Policía bonaerense (“una fuerza muy grande donde tenemos de todo adentro”, según la definió ayer) aunque aclaró: “La conducción no es un tema que me preocupa”.
Según sostuvo el gobernador, en las últimas tres semanas “ha bajado el ambiente del delito impune o por lo menos ha bajado la sucesión de hechos resonantes”. “Notamos un cambio y una mejora con la presencia de todas las fuerzas de seguridad y una actitud de reactivación de la policía bonaerense”, manifestó, y explicó que la clausura de los desarmaderos permitió “descomprimir la situación de inseguridad”.
Por último, el gobernador adelantó que en los próximos días se reunirá con Beliz para analizar los resultados obtenidos en los operativos realizados entre las fuerzas de seguridad.