Si en las PASO se impusiera como candidato presidencial del Frente para la Victoria Daniel Scioli, un candidato resistido al interior del kirchnerismo, ante este escenario, ¿cree que el kirchnerismo va a acompañar a Scioli?

–Es una pregunta que no tiene una respuesta lineal. Yo preferiría responderla de otro modo. Todavía falta un camino para definir la fórmula del Frente para la Victoria. Dentro de ese recorrido, hay una posibilidad cierta de una confluencia de diversos precandidatos que, con sus más o con sus menos, representan más genuinamente la historia del kirchnerismo. Scioli es un aliado importante en el interior del Frente para la Victoria. Pero Scioli no me representa ni creo que sea estrictamente la continuidad del kirchnerismo.

–¿No lo votaría si fuese el candidato presidencial del Frente para la Victoria?

–Depende del escenario electoral de octubre...

–¿Si es Scioli o Macri o Scioli o Massa?

–Es difícil decir... Habría que ver cuál es el discurso de Scioli, tanto yendo hacia las PASO como si llega ser el candidato que emerge de las PASO, y quiénes serán parte de su lista, tanto a nivel de vicepresidente como de legisladores. Si su candidatura está acompañada fuertemente por lo mejor del espectro del kirchnerismo, una vez que se resuelvan las PASO habrá que ver. Pero insisto, yo prefiero verme discutiendo y participando de la construcción de una fórmula que represente más intensamente al kirchnerismo. Y después veremos... En ese sentido, acepto una prohibición talmúdica: nuestra tarea no es la tarea de los adivinos, sino que tenemos que pensar el presente, que ya es bastante arduo. Tenemos que resolver qué va a pasar con el fallo de Griesa, qué consecuencias puede tener que Griesa se mantenga inalterable y que algunos declaren el default técnico. Estamos frente a esa disyuntiva, que no es menor. Lo importante para mí en este momento es consolidar un proyecto que se encuentra frente a uno de los desafíos más complicados. Tuvo muchos a lo largo de su historia y siempre logró salir hacia adelante, generando condiciones para una profundización. Es un desafío enorme de un poder económico central, que supone toda una concepción de lo que es el orden financiero internacional. Frente a esto, tenemos que esperar un poquito para las candidaturas, ¿no?