La fiscal Paula Assaro impulsó la apertura de una investigación sobre los responsables de la filtración de fotos de Alberto Nisman, varias de ellas con mujeres. La denuncia la hizo la jueza Fabiana Palmaghini, quien le apuntó a la División Apoyo Tecnológico de la Policía Federal. Assaro pidió medidas sobre el papel de cuatro policías de esa área, pero señaló que había que rastrear a otras personas que pudieron haber “estado en contacto con el material de carácter secreto” que había sido incautado en la vivienda del fiscal fallecido. A partir de esto Palmaghini puso al frente del peritaje tecnológico a la Policía Metropolitana.