“La emoción fue fuerte, fue un momento difícil, pero a la vez gratificante porque me encontré con los compañeros que dejé con vida y hoy están desaparecidos, los encontré en el recuerdo, en la memoria. Estaban ahí junto a nosotros. Fue muy emocionante”, aseguró ayer Osvaldo Barros, sobreviviente de la ESMA, en un balance luego de participar el viernes pasado de la recorrida por las instalaciones del ex centro clandestino de detención junto al presidente Néstor Kirchner. Carlos Lordkipanidse, también sobreviviente de la ESMA e integrante de la Asociación de ex detenidos-desaparecidos, aseguró que la experiencia fue “difícil”. “Reingresamos a ese lugar de horror, pero por el otro lado la condición en la que uno ingresó a ese lugar en el ‘78 y como lo hace ahora es muy diferente. Yo ingresé en el ‘78 esposado, con capucha y grilletes y en esta oportunidad ingresamos con el presidente de la Nación”, explicó Lordkipanidse.