El líder de la CCC, Juan Carlos Alderete, fue el primero es destacar que la toma de los McDonald’s corrían por cuenta exclusiva de los piqueteros liderados por Raúl Castells.
–¿Por qué salió a aclarar la postura de la CCC frente a la toma de edificios realizada por el Movimiento de Castells?
–Porque nosotros no coincidimos para nada, y creemos que ese tipo de acciones afecta nuestro reclamo. La metodología de ocupar locales ya la hemos pasado.
–¿En qué los afectó la toma de varios McDonald’s?
–Por un lado, en que la movilización que realizamos con miles de compañeros por la ciudad se perdió, porque todos pusieron el ojo en los McDonald’s, y no en las miles de personas que marcharon frente a los tres poderes del Estado para exigir que se universalicen los planes. Y además porque el Gobierno critica sobre ese hecho puntual, nos engloba a todos dentro de esa crítica y evita darnos la respuesta que pedimos, que es que se reúna a todos los piqueteros para ver si logramos o no puntos de acuerdo.
–¿Por qué Castells insiste con las tomas, si hay mal humor de parte de otras organizaciones?
–Creo que lo hace para tener protagonismo político. Realmente, cuando vemos que nos afecta por el impacto negativo que logra, creemos que tiene una actitud sectaria, mezquina. Nosotros sabemos que hay gente que está molesta con nuestras medidas de lucha, y tratamos de que sea la menos gente posible la perjudicada. Pero lo que hace Castells tira para abajo, porque la mayoría de la gente, y sobre todo la clase media que es la que forma la opinión, no sabe distinguir entre las agrupaciones.
–Muchas agrupaciones, sin embargo, no invalidan esta modalidad.
–Nosotros ya la abandonamos. Nosotros creemos que ser duros es otra cosa, significa ser multisectoriales, significa masividad y compañeros convencidos por lo que salen a luchar.