EL PAíS
• SUBNOTA
Otras voces
Ricardo López Murphy, líder de Recrear: “Yo no fui invitado, así que no puedo decir si voy a participar o no. El diálogo debería ser una instancia normal en un país y llama la atención que lo que debería ser un hecho normal sea casi revolucionario. El diálogo no puede ser usado ni con una finalidad de escenografía, ni tampoco puede pretender simplemente una oposición complaciente e indulgente. El clima del diálogo debe ser de cordialidad y de cortesía, de intercambio de opiniones, pero nadie declina sus puntos de diferencia porque dialogue. El Presidente sabe muy bien que en caso de concurrir voy a plantear gravísimos problemas institucionales del país”.
Raúl Alfonsín, ex presidente: “A los intolerantes no hay que llamarlos a una mesa de diálogo porque lo único que hacen es ofender o agraviar. A ellos yo no los llamaría nunca”.
Margarita Stolbizer, diputada y titular de la UCR bonaerense: “El diálogo tiene que tener políticas consensuadas y sustentables a través de los tiempos; debe asentarse en la voluntad política de construir consensos para políticas de Estado. Tengo muchas prevenciones de que se trate de una convocatoria para la fotografía solamente en un momento de debilidad del Gobierno. Tampoco aliento el diálogo bilateral porque es el que da razonables sospechas a lo que planteaba Carrió (la titular del ARI, Elisa), que es la idea de una negociación bilateral, sino que participo de la idea de un diálogo político multipartidario para discutir políticas de Estado. De todos modos, no comparto la idea de Carrió, que es ver cómo se incendia un edificio mientras ella se salva desde la vereda de enfrente, prácticamente regocijándose de su propia salvación.”
Nota madre
Subnotas