Atilio Alterini*.

“NO ES OBJETABLE”
“El que los padres paguen por los daños de los hijos menores de edad es una solución milenaria, ya el Derecho Romano lo contemplaba. La Argentina tiene un régimen de mayoría de edad muy extraño en el mundo. He criticado duramente el que los chicos a los 18 ya puedan votar, morir por nosotros en Malvinas, pero no puedan comprarse una moto hasta los 21. Esto sucede porque se quedan las leyes, los proyectos para modificarlas no funcionan si no tienen el suficiente lobby político. En nuestra cultura jurídica es absolutamente legal que paguen los padres, es la aplicación estricta del Código Civil, lo que no es objetable. Porque no hay razón para que un mozalbete cause daño a las personas; lo mismo valdría si rompiera con una honda una vidriera. Nos estamos confundiendo en el rol de paternidad, se la toma con mucha ligereza. Son lindos los escarpines, las batitas, pero más importante es contener a los chicos, educarlos, formarlos. Responder por los daños que pudieran realizar hace a la responsabilidad de la paternidad. Que así sea es valioso en una sociedad seria.”

* Decano de la Facultad Derecho de la UBA.


Emilio Garcia Mendez *.

“ATRASO CON LA INFANCIA”
“Es absurdo mantener la minoría de edad hasta los 21, cuando a los 18, los chicos pueden ir a una guerra y matar, pero no pueden disponer de sus bienes. De ahí para adelante, hay una serie de situaciones judiciales que sólo se explican si se tiene en cuenta que la Argentina es el país de América latina más atrasado en materia de protección de la infancia y el más brutal con ella. Es el más atrasado porque todavía se regula con una legislación de 1919. Y es el más brutal porque es el único país de la región donde existe la reclusión perpetua para los menores de edad. En el país son once chicos. También graves son las penas altísimas que últimamente se impone a menores, sorprende la cantidad que hay, que van de los 20 a los 25 años de encierro. De estos chicos, seis son de la ciudad de Buenos Aires, 3 de Mendoza, uno de Santa Cruz y uno de Catamarca. Si de la provincia de Buenos Aires no hay ninguno, es porque los matan. Lo dice su propia Corte Suprema, cuando reconoce que entre 2001 y 2002, murieron 60 chicos en enfrentamientos con la policía.”

* Fundación Sur Argentina.