La CGT oficial quiere abrir las negociaciones para lograr un aumento salarial de emergencia. La central de Rodolfo Daer justificó su demanda en la pérdida del poder adquisitivo por efecto de la inflación de precios. La ministra de Trabajo, Graciela Camaño, dijo que estudiará el pedido.
Los sindicalistas buscan forzar el aumento a través de una paritaria nacional que beneficie a los trabajadores de la actividad privada. Para ello invitaron a discutir el tema a la Cámara Argentina de la Construcción, la Unión Argentina de la Construcción, la Asociación de Bancos Argentinos, la Asociación de Bancos Privados, la Unión Industrial Argentina y la Cámara Argentina de Comercio.
En una nota formal –que deliberadamente se hizo conocer el mismo día del paro general de la CTA–, la CGT oficial propuso al Gobierno y a las cámaras empresarias tres tipos de modalidades para recomponer los salarios:
- “Incremento mínimo de emergencia conforme al reconocimiento oficial y de organismos especializados de la inflación”.
- “Bandas salariales de aplicación sectorial, fijadas por la comisión negociadora, conforme a la inflación prevista”.
- “Contenidos directrices para la concertación de redistribución de ingresos en función de la productividad”.
“Lo que le dijimos es que sí o sí hay que mejorar el ingreso de los trabajadores, porque la licuación de los salarios es insostenible. El sector empresarial tiene que tener comprensión por sus asalariados”, señaló Daer a Página/12.
–En medio de la recesión, ¿usted cree que las empresas están en condiciones de afrontar mayores costos?
–Para nosotros es fundamental la intervención del Gobierno, a través de una reducción impositiva para las empresas, que no es pérdida para el Estado ya que después lo recupera por IVA a partir del aumento del consumo.