Si bien el senador uruguayo por el Frente Amplio Alberto Couriel no se reconoce como un probable ministro de Economía de su país, si la izquierda ganase las próximas elecciones podría ocupar esa cartera. Couriel habló ayer con Página/12 y se diferenció del presidente uruguayo Jorge Batlle. “Para nosotros la unidad de América latina y del Mercosur es una forma de aunar fuerzas para negociar ante los organismos internacionales”, opinó.
–¿Por qué el Frente Amplio criticó a Batlle?
–Son declaraciones inadecuadas a las circunstancias, como las que hizo sobre el Alca y el Mercosur y las que hizo cuando atacó a Fidel Castro y terminó rompiendo con Cuba.
–¿Las declaraciones de Batlle pueden deberse a que su intención es despegarse de la imagen que tiene Argentina en el exterior?
–No diría eso. Batlle hizo un esfuerzo ante los organismos internacionales y diferentes organizaciones políticas del mundo para tratar de ayudar a la Argentina, porque si a la Argentina le va mal, a todo el Uruguay también, porque afecta el turismo y las inversiones.
Todos hacemos el máximo esfuerzo para que el sistema financiero salga de la mejor manera posible. Nadie quiere el corralito. Todos los partidos políticos queremos lo mejor para la Argentina.
–¿Cómo es Batlle como presidente?
–Es un tipo al que le gusta exponer. Tiene ideas nítidas, dice que no es neoliberal sino sólo liberal. Pero las políticas que lleva adelante tuvieron resultados negativos.
–¿Cómo se vive el ajuste en el Uruguay?
–Los uruguayos están desesperanzados. Hay un alto nivel de desempleo y pobreza. Entre los jóvenes el desempleo llega al 36 por ciento, lo que provoca la emigración. El problema del empleo se resolvería si hubiera crecimiento. La economía uruguaya se está cayendo desde hace tres años y la respuesta del gobierno es el ajuste fiscal. Sus políticas se basan en que si el déficit fiscal baja, se reaviva el crecimiento.
–¿Ustedes lo rechazan?
–Si se baja el gasto público la demanda interna también baja y lo mismo pasa con la recaudación. La política cambiaria de Uruguay estuvo ligada a la ley de convertibilidad de Argentina con un elevado atraso cambiario que fue en contra de la competitividad, la producción interna y la exportación, lo que redundó en un alto desempleo. En los hechos el ajuste fiscal proporciona recesión y profundización. Hay una desesperanza y una sangría migratoria brutal de capital humano, porque se van los más preparados y con mejor formación. El ajuste de Batlle cayó muy mal en el Uruguay. El 16 de abril hubo una excepcional manifestación de más de 50 mil personas que pedían tener un diálogo con el presidente para que modifique sus políticas económicas. Pero el presidente no escuchó.
–¿Qué políticas cambiaría el Frente Amplio si llegara a ser gobierno en las próximas elecciones?
–Somos críticos con el modelo que se basa en la liberalización financiera y comercial. Los intentos de privatizaciones fueron frenados en Uruguay con los plebiscitos que trabaron las leyes correspondientes. Juntamos firmas y se frenó gracias a la participación de la sociedad y nos enfrentamos a una ley que se planteaba como clave para la plaza financiera y la entrada de capitales. El país requiere un modelo mucho más productivo y social. Hoy el modelo le da prioridad al aspecto financiero y subordina la producción, y lo social quedó desprotegido.
–¿Cuál sería la relación con Argentina?
–Estamos en un mundo de bloques: la Unión Europea, el Nafta, el sudeste asiático. Uruguay solo no puede vivir en este mundo, necesita de la unidad con países cercanos. Somos muy mercosurianos para enfrentar al mundo y a su vez muy latinoamericanos. Precisamos negociar desde una unidad de América latina. Nos diferenciamos de Batlle en que él quiere un tratado bilateral de comercio con Estados Unidos. El FMI se equivocó en Rusia, enBrasil, en la Argentina y en Asia. Aplican recetas sin intentar entender la situación concreta y subjetiva de cada país.
–¿Coincide con la idea de Batlle de que los argentinos son “una manga de ladrones”?
–Cada vez que me encuentro con un argentino le digo que yo soy de la provincia de la Banda Oriental. Deseo que Argentina salga de la crisis manteniendo los principios democráticos. Y en cuanto a Eduardo Duhalde, es difícil evaluar a un gobierno que viene siendo agredido desde afuera.
Entrevista: Jimena Fuertes