Los problemas de contaminación ambiental en Uruguay no se limitan a las papeleras y a Fray Bentos. La fábrica sulfúrica Isusa, que justamente pretende proveer de ácido sulfúrico a las plantas de Botnia y Ence, fijó su emplazamiento en las afueras de Carmelo, generando reacciones en contra de los otros empresarios que invirtieron en la zona. El hotel cinco estrellas Four Seasons anunció que está dispuesto a cerrar sus puertas si Isusa se instala en los alrededores, algo que generaría “una catástrofe” a las aspiraciones turísticas de Carmelo, según explicó el dueño del hotel, Farid Bechara. Lo mismo opinaron los empresarios vitivinícolas de la región que sostuvieron que su producción necesita “un medio ambiente libre de agresiones”, objetivo que echaría por tierra la instalación de la proveedora de ácido de las papeleras. Al igual que sucede con los empresarios de Botnia y Ence, el dueño de Isusa asegura que su emprendimiento se moverá dentro de los parámetros de emisión permitidos. Así, sostuvo que su planta estará a 7 kilómetros de las canchas de golf del Four Seasons, pero que la emisión de los efluvios del ácido no irá más allá de los 800 metros. Para el dueño del hotel, en cambio, la fábrica provocará una nube de humo contaminante que flotará sobre Carmelo dejando en el olvido la renombrada limpieza de su medio ambiente. Según el empresario, la promesa de instalación ya le costó 600 mil dólares en inversores que huyeron. También dos mansiones no se construyeron por la amenaza de los nubarrones de ácido. Habrá que ver si los habitantes de Carmelo se enojan y se lanzan a la ruta.