–¿Cómo tomó conocimiento de la existencia de estas cajas con objetos y pertenencias de víctimas de Cromañón?

–El viernes 28 de julio, cuando estábamos embalando todo para la mudanza de la oficina, que se hizo el lunes siguiente, apareció una caja de archivo azul con cosas adentro, había bolsas rotuladas: una mochila, una remera de Callejeros, un DNI, entre otras cosas. El día de la mudanza apareció una segunda caja con objetos similares, y cuando desembalamos todo en la nueva oficina se encontró una tercera. Le pregunté a una empleada que estaba desde la gestión anterior si sabía qué era eso y me dijo que se lo habían entregado en el Hospital de Clínicas a Gabriela Alegre. Mandé a preguntarle (a Alegre) y contestó: “María José es abogada, ya va a saber qué hacer”. Entonces llamé a un escribano público, que labró un acta y lacró las cajas.

–Alegre dice que cuando intentó remitir estas cajas a la Justicia, en 2005, no fueron recibidas.

–No hay constancia de eso. Y no es lo que nos pasó a nosotros. Cuando notificamos a la jueza, enseguida libró un oficio a la policía para que retirara los objetos.

–¿Cree que alguno de estos elementos podría tener valor para la causa?

–La jueza no lo dice. Pero en todo caso, lo correcto era entregar los elementos a los familiares.

–La funcionaria renunciante dice que en su momento se entregaron algunos objetos a los familiares que se presentaron...

–No hay constancia por escrito de ninguna entrega.

–También dice que todo es una operación política contra el ex jefe de Gobierno Aníbal Ibarra.

–No es cierto. Cuando hice la presentación del escrito ante la jueza, el lunes 7 a la mañana, todavía no sabía que habían sobreseído a Ibarra. De ningún modo fue usado políticamente.

–¿Por qué decide entonces iniciar un sumario administrativo sin antes pedir explicaciones a la funcionaria?

–Se la consultó y respondió que yo ya sabría qué hacer. Lo preocupante es que no tenía un comprobante escrito de que el material estaba a disposición de la Justicia. En ese sumario ya declaró una funcionaria de la Dirección de Asistencia a la Víctima que recibió los elementos del Hospital de Clínicas y se los entregó a Alegre.

–Si la funcionaria renunció, ¿no queda automáticamente afuera del sumario?

–Sí, queda afuera, pero se va a saber qué responsabilidad tuvo el personal que participó.

–Si no entorpecía el desarrollo de la causa, ¿cuál cree que es la irregularidad cometida?

–Los objetos tienen más valor para los familiares que para la Justicia. Hoy vino una mamá para agradecer porque recuperamos el corpiño y un reloj de su hija, que habían estado en el Clínicas, pero allí no se los quisieron devolver. Aunque todavía no los pudo ver, los reconoció por la descripción.

–Alegre también dice que se enteró del pedido de renuncia por los medios.

–No es cierto. Yo estaba con la ministra cuando la llamó esta mañana (por ayer) para pedirle que renunciara.