La televisión cumple reglas que el medio mismo dicta. Una de esas reglas dice que en la pantalla no hay espacio para profundizar demasiado. Que si el tema es largo o complicado, el televidente se va. El grupo de realizadores de “Salida de emergencia”, un programa que se emite en vivo los domingos a las 22, por P + E, apuesta a funcionar pasando por alto esa regla autoimpuesta. “¿Por qué el análisis de la deuda externa tiene que ser aburrido?”, pregunta Mauro Federico, conductor del programa. “Porque se supone que consiste en números y datos económicos, cuando en realidad tiene que ver con la vida concreta de todos nosotros”, responde. El enfoque de “Salida de emergencia” es el opuesto al de los programas periodísticos centrados en la denuncia: “En todo caso, denunciamos el funcionamiento del sistema, no las personas o los hechos”, explica Federico.
El programa, que comenzó en agosto del año pasado, tiene como columnistas fijos al economista Claudio Lozano y el politólogo Carlos Borro, más los invitados que hablan sobre un tema en particular de cada emisión. Pero el fuerte está en la investigación de los temas tratados –a cargo de un joven equipo de producción compuesto por Federico Simonetti, Silvia García, Nair Salvetti, Gabriela Vulcano y Enrique Federico– y en la forma en que esos temas se ponen en relación con el contexto y la historia. Algunos de los temas abordados en el programa fueron la venta de tierras en el sur del país, el negocio de las concesiones de la basura en la ciudad de Buenos Aires y el 19 y 20 de diciembre. Hoy se analizará qué hay detrás de la obediencia debida y el punto final, y el debate que actualmente ocasiona la posibilidad de su derogación, con la presencia de Estela Carlotto y el gral. (R) Martín Balza como invitados. Con el paso del tiempo, el programa sumó una versión radial, de lunes a viernes por AM 930, Radio Cooperativa.
–¿Qué es lo que diferencia a “Salida de emergencia” de otros periodísticos?
M. F.: –Que nosotros hacemos pedagogía de la noticia. Vamos al análisis de los actores sociales que están involucrados, rastreamos la historia del acontecimiento. No presentamos los temas de la nada.
F. S.: –La televisión tiende a mostrar los síntomas, sin importar qué hay detrás de lo que pasa. Y a presentar las cosas por separado: se habla de fuga de capitales y de deuda externa, por ejemplo, como si fueran temas inconexos. Y a veces la causa de esa inconexión no es sólo política de medios, muchas veces lo que pasa es que a los periodistas no se les ocurre que deberían ir juntos.
–¿Creen que también hay necesidad de impacto permanente?
M. F.: –No nos interesa el escándalo. El escándalo está en la misma realidad, que nos pasó por las narices y no supimos ver. Todo lo que decimos está basado en una minuciosa investigación, no en “nos parece”.
F. S.: –Sí, tenemos en claro desde dónde hablamos, lo nuestro no es la imparcialidad. Pero sí ponemos las cartas sobre la mesa.
M. F.: –Yo soy secretario de redacción del periódico de la CTA. Hablo desde ahí, y me hago cargo.