Hasta el año pasado, se llamaba EFI e incluía en su selección de novedades a tres potencias del cine europeo, entre ellas Italia. Pero la muestra que comienza mañana en las salas del complejo Village Recoleta se titula simplemente España y Francia de preestreno. Las producciones de Cinecittá esta vez no serán de la partida, pero a cambio las otras dos cinematografías redoblaron su presencia, con una serie de once títulos de los últimos años, que hasta el momento no habían llegado a la cartelera porteña.
Los españoles hacen punta de lanza con El gran Gato, la película más reciente del director catalán Ventura Pons, de quien el año pasado ya se conoció en Buenos Aires una retrospectiva de su obra, una de las más personales –y de las más secretas– de todo el cine español. Después de una prolongada etapa como director teatral, que comenzó a los 21 años, Ventura Pons fue la sorpresa del cine español con Ocaña, retrato intermitente (1978), el inicio de una filmografía celebrada en los principales festivales internacionales y que incluye algunos títulos emblemáticos, como La rubia del bar (1986), ¡Puta miseria! (1989), El porqué de las cosas (1994), Actrices (1996), Caricias (1997) y Anita no pierde el tren (2000), que tendrá su estreno comercial porteño en la primera quincena de noviembre. A su vez, El gran Gato es un musical que hurga en el recuerdo del extraordinario compositor y cantante rosarino Javier Patricio “Gato Pérez”, a la vez que asiste al concierto de catorce de sus composiciones, interpretadas por figuras de la talla de Martirio, Luis Eduardo Aute, Clara Montes y Kiko Veneno, entre otros famosos de la canción popular española.
La selección proveniente de Madrid se completa con Cuando todo esté en orden (2002), de César Martínez Herrada, un drama familiar que mereció los mayores elogios de la crítica española, empezando por los del diario El País, donde Mirito Torreiro señaló “es preciso ver una película como ésta, por su honestidad y su desarmante humanidad”. También se verán Eres mi héroe (2003), de Antonio Cuadri, sobre la etapa de descubrimientos de un adolescente sevillano; La luz prodigiosa (2003), de Miguel Hermoso, con Alfredo Landa y Nino Manfredi, sobre los primeros días de la Guerra Civil Española; Palabras encadenadas (2003), de Laura Mañá, un thriller con Darío Grandinetti y Goya Toledo, que llegará especialmente a Buenos Aires para presentar la película; Tiempo de tormenta (2003), de Pedro Olea, también con Grandinetti, más Jorge Sanz, Maribel Verdú y María Barranco; La vida de nadie (2003), de Eduard Cortés, premiada en el Festival de Valladolid; y Torremolinos 73 (2003), de Pablo Berger, con Javier Cámara y Candela Peña, sobre una pareja como tantas de la puritana España del último período de franquismo, que encuentra una vía de escape a su gris rutina cotidiana cuando comienzan a realizar películas eróticas en Súper 8mm.
Los franceses, por su parte, se harán presentes con Saint-Cyr, de Patricia Mazuy, con Isabelle Huppert, Jean-Pierre Kalfon y Serge Reggiani, un éxito de la temporada parisina 2000, sobre dos amigas inseparables en la corte de Luis XIV; Mercredi folle journée (2001), de Pascal Thomas, con Vincent Lindon; y Pas de scandale (1999), de Benoit Jacquot, selección oficial de los festivales de Venecia y Toronto, también con Mme. Huppert, sobre el extraño romance entre un gran empresario recién salido de la cárcel y la peluquera de su esposa.