Whisky Romeo Zulu es una película de gran potencia. Desarma un mito intocable del imaginario colectivo: que los aviones son seguros. Además, cuenta una historia de corrupción, un tema que pocas veces llega al cine argentino. Es tan fuerte el film de Enrique Piñeyro que supera sus deficiencias narrativas, que las tiene, como la subtrama amorosa, que se devora hasta una actriz inmensa como Mercedes Morán. ¿Encima pretendemos que sea perfecta?