Con ánimo de que las cosas queden claras, respecto de su adhesión a corrientes musicales como la bossa nova y el tropicalismo, Gal Costa explica en su biografía gastronómica: “Yo soy en verdad la portavoz del tropicalismo. En la década del 60, cuando Caetano Veloso y Gilberto Gil tuvieron que exiliarse en Londres, quedé como una verdadera portavoz, cantando las canciones que ellos componían en Londres, y manteniendo el idealismo, o sea, el tropicalismo vivo. Pero hubo un movimiento, en Brasil, más importante musicalmente y es la bossa nova. El tropicalismo se relacionó al cambio de comportamientos ligados al movimiento hippie de la época: los Beatles, usar instrumentos eléctricos. La bossa nova transformó de manera radical la música brasileña. Joao Gilberto inventó aquella batida de bossa y aquel canto diferente”.