Chrissie Hynde descubrió el rock como miles de jóvenes en los ’60: a través de la invasión británica encabezada por Los Beatles y Los Rolling Stones. Por eso, tras pasar por la universidad, abandonó su ciudad natal (Akron, Ohio) y se fue a Londres, donde conoció al crítico Nick Kent, quien le ofreció escribir sobre rock. Hynde llegó justo para ver la explosión social y musical del punk, y bajo ese halo construyó The Pretenders. En lo musical, sin embargo, la banda tenía más del otro movimiento surgido a fines de los ’70: la new wave. De allí los estribillos gancheros de canciones como el hit Brass in a pocket. El primer álbum de Chrissie y sus muchachos, Pretenders, apareció en 1980 y fue un éxito. Tras la publicación de Pretenders II y mientras la cantante quedaba embarazada de Ray Davies (The Kinks), dos de los miembros del grupo murieron de sobredosis. A partir de entonces, la formación de la banda varió casi todo el tiempo. Hynde se casó con Jim Kerr (Simple Minds), volvió al éxito con la canción Don’t get me wrong, aunque más tarde los hits comenzaron a escasear. Pretenders publicó sólo ocho álbumes de estudio (el anteúltimo se llama ¡Viva el amor!, así, en español), pero
Hynde no se limitó al trabajo con el grupo: ha participado en discos y shows de músicos tan distintos como UB40, Rod Stewart e Iggy Pop. Además, la dama es una incansable luchadora por los derechos de los animales. En los últimos tiempos, fue presa en Nueva York y en París por participar de manifestaciones contra la marca de ropa Gap y contra los restaurantes Kentucky Fried Chicken.