En términos de relación entre películas y público, creo que el 2004 fue un año bastante desastroso. Sólo tres películas, producidas por multimedios, lograron llevar un millón de espectadores o más. Después hubo un puñadito, entre las cuales se cuenta Roma, que llevaron 150 o 200 mil espectadores. De ahí para abajo hubo muchas que llevaron nada, cifras prácticamente irrelevantes. Las medidas de cuota de pantalla y medias de continuidad ayudan a corregir algunas situaciones sumamente injustas e irregulares. En nuestro caso, un día antes del lanzamiento de Roma las cadenas nos avisaron que no la iban a estrenar en Flores y Caballito, dos plazas clave para esta película. Nuestro distribuidor calcula que ahí perdimos unos 100 mil espectadores. Y con 100 mil espectadores más hubiéramos estado en una cifra más estimable, equivalente a lo que llevó nuestra película anterior, Lugares comunes.
* Director. Este año estrenó Roma.