ESPECTáCULOS
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La modernidad de Pirandello
Por ruben Szuchmacher
Esta puesta se basa principalmente en una premisa: el redescubrimiento de la modernidad en Pirandello, que ha sido velada por prejuicios culturales. Esta idea surgió de las primeras lecturas, como si fuésemos un lector cualquiera. A partir de las traducciones existentes nos encontramos con un tipo de texto que nos sonaba arcaico, demodé, retórico. Por eso, en nuestro trabajo, partimos de una consigna para movilizar ese prejuicio extendido: a la idea de un autor “pasado de moda” le opusimos la premisa de que Pirandello era un autor moderno y nosotros, seres incapaces de descubrir, en la maraña de palabras, su contemporaneidad. A partir del trabajo diario de ensayos logramos descubrir al gran dramaturgo. En principio, nos apoyamos en una traducción nueva, literal dentro de los márgenes que permite el traslado de un idioma a otro, alejada de la idea de “versión” o “adaptación”, sino la pura letra vertida a un castellano fluido, a cargo de Daniel Brarda e Ingrid Pelicori.
Con ese material, fiel como pocos al original, el concepto de dirección se centró en descubrir su increíble movimiento dramático. La puesta buscó hacer circular el texto por la escena en la misma dirección que el discurso pirandelliano. La literalidad, en este caso, ha sido la mejor guía para llevar adelante el trabajo. Eludimos la trampa que el mismo Pirandello plantea de manera sutil: hacer creer que es un autor a la manera de los realistas de finales del siglo XIX y comienzos del XX, cuando en verdad está más cerca de las experimentaciones brechtianas o beckettianas. Allí donde parece haber un personaje a la manera del realismo, Pirandello construye una “máscara”, un carácter vacío, sólo sostenido por su discurso.
La puesta en escena apuesta a la palabra en movimiento, a la revelación por omisión, a la ausencia de una explicitación escénica que podría devenir de una lectura realista de la obra. Las relaciones entre verdad-ficción y cordura-locura se despliegan de manera ágil, llenas de vitalidad, de liviandad, propias de un tema que el mismo Pirandello trata con gran habilidad al no definir nunca con precisión los márgenes de la realidad, que en definitiva es su tema.
Nota madre
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